Capítulo 6

Damian: 

Hoy era la prueba de fotografía para el comercial que teníamos en puerta, uno sería para una crema facial y otro de ropa interior para dama y caballero así que había mucho trabajo por hacer.

Eran las seis y cincuenta de la mañana y la señorita no se ha levantado, sabía que iba a suceder. Solo a ella se le ocurre mirar series hasta tarde.

—Buenos días Damian —Azael salió mientras se arreglaba el saco— ¿Gina sigue dormida?

—Si —deje la taza sobre la mesa— tu café, el viernes tenemos una cena con las sanguijuelas ya sabes, papá estará presente y le presentaremos a Gina.

—Perfecto —bebió del café.

Escuchamos pasos y en nuestro campo de visión apareció Anderson bien arreglada.

—Buenos días —sonrió.

Debo admitir que si cumplió con su palabra. Además de que estaba vestida como una secretaria pero mucho más elegante, aunque se veía incomoda con esos zapatos. Anderson tiene una cabellera larga y oscura, así era la de mamá antes del cáncer.

—Ya que estas despierta, nos vamos, vienes conmigo.

—Como guste señor.

Que manía de llamarme señor. Tengo treinta, aunque me siento raro cuando me dice así.

Los tres salimos del departamento rumbo al estacionamiento, Azael se fue en su auto, mientras que ella y yo nos fuimos en el mio.

—¿Que haremos hoy? —preguntó.

—Trabajar, cuando estemos allá te explico lo que debes hacer, por ahora mantente en silencio..

La escuché bufar y de reojo vi como se puso sus audífonos. Perfecto, me gusta estar en silencio mientras manejo. Pero por lo visto, no me va a dejar en paz.

—A mi me gustan mayores.. De esos que llaman señores, de los que te abren la puerta y te mandan flores..

Empezó a cantar en lo que creo que es español y joder, canta pésimo, y, así fue durante todo el camino hasta el trabajo, para la próxima que se vaya con Azael. Ya llegando a la empresa entramos y de inmediato nos fuimos al área de fotografía para empezar con las pruebas de vestuario para la sesión de fotografía.

Por lo general Azael y yo nos encargamos de mirar cada sesión, prueba de video, todo lo que tenga que ver para la realización de cada comercial, me gusta ver que todo salga más que perfecto y sin ningún margen de error, ya que si todo sale mal, es dinero que pierdo, además de los clientes y eso no puedo permitirlo.

—Buenos días señores Praxton —el fotógrafo llegó— ya está todo listo para la sesión, ya mi modelo está aquí.

A nosotros llegó el mismísimo Jean Carlo D' Luca, el modelo italiano, lo conozco porque ha trabajado con nosotros en campañas anteriores, el maldito es el ser más egocéntrico que conozco y tiene muy mala fama, aun así, lo que toca, se convierte en un éxito.

—Señores Praxton, que bueno volver a verlos.

—D' Luca, bienvenido —respondí Azael yo sólo di asentimiento, no me cae bien. Luego apareció Chesiree, la dueña de la marca de ropa interior.

—Señores Praxton —estrechamos su mano—, que alegría verlos de nuevo.

—Igualmente —dije yo.

Tuvimos sexo una vez hace dos años, muy linda pero quería tener algo serio y yo no estoy para eso.

—No hay modelo femenina —ella se cruzó de brazos.

—De hecho si la hay, tenemos a una perfecta para el trabajo —dije yo—, se llama Gina Anderson, Azael, ve por ella.

El asintió y fue por Gina quien estaba afuera, no pasó mucho cuando ambos entraron al set de fotografía.

—Ella es Gina, será la modelo sólo por hoy.

—Chesiree la miró de arriba a abajo —Es linda, veamos lo que tiene.

El maquillador y fotógrafo la vieron también y al parecer les gustó ya que ambos dijeron que si.

—Que vaya a cambiarse, en el vestidor está la chica y te indicará que usarás.

Gina asintió y se fue al vestidor, Azael y yo por lo pronto nos sentamos a mirar la sesión. Todos se pusieron en sus lugares para empezar con el trabajo, D' Luca salió con un pantalón de mezclilla roto, descalzo y sin camisa, le retocaron el maquillaje y el cabello, se soltó el botón del pantalón y de inmediato la sesión empezó.

D' Luca tiene un buen porte y todas las marcas desean tenerlo como modelo a pesar de la mala fama que tiene, según los medios de comunicación y las redes sociales, es un hombre con problemas de ira y un acosador, son solo rumores ya que nunca le han podido probar nada. A mi no me cae bien ya que el es demasiado egocéntrico y grosero, personas así simplemente no me caen bien.

Ya terminadas las fotos con el, salió Gina con una bata de baño. Lucía un poco incómoda así que mi hermano y yo nos acercamos a ella.

—¿Estás bien? —le preguntó.

—Si, solo son nervios nada más.. —sonrió un poco— ya se me va a pasar.

Asentimos y volvimos a sentarnos en nuestros lugares. Escuché el jadeo de Azael cuando vimos a Gina quitarse la bata. Tenía un conjunto de dos piezas color negro de la marca de Chesiree, el fotógrafo le indicó que es lo que tenía que hacer, las poses y lo demás. La verdad no pensé que lo haría tan bien, parecía una modelo profesional.

—Lo hace bastante bien —mire a Azael y no dejaba de mirarla.

—Supongo —me acomodé el saco.

Ya suficientes fotos sacadas, ella se volvió a colocar la bata y fue a cambiarse la ropa por otra de un color distinto. Así fue toda la sesión de fotos, se cambió al rededor de tres veces más y ya había terminado la sesión, ella se había ido a cambiar mientras nosotros terminábamos lo demás.

—Las fotos quedaron muy bien —dijo Chesiree— la chica es muy buena, debería ser modelo permanentemente.

—Es cierto —intervino D' Luca— a parte de hermosa y sensual, le sale con mucha naturalidad.

Su maldito comentario estuvo fuera de lugar, iba a responderle pero Gina salió ya vestida y sonriente.

—Ya vi las fotos.. Lo hice bien —sonrió aún más.

—Claro que si —Azael se posó a su lado— lo hiciste bien.

Yo me posé a su otro lado, no me agrada como D'Luca la está mirando. 

—¿Cuándo saldrán las fotos? —pregunté.

—En una semana aproximadamente ya que quedan los últimos detalles —ella me miró— queda muy poco por hacer.

—Bien, mañana lo terminamos, por lo pronto debemos irnos a la siguiente sesión.

—Claro que si —ella sonrió y yo sólo la ignore ya que mi vista no dejaba a D' Luca quien no dejaba de ver a Gina de una forma en la cual no me gustaba.

—Nos vamos —tomé su mano— tenemos trabajo que hacer.

Sin esperar más la saqué del estudio y fuimos de una vez a mi oficina. No me gustó como la miraba, ella y yo no somos nada pero no le da el derecho de acosarla con una mala mirada. Ya veo que los rumores son bastante ciertos.

—¿Y eso porque fue?

—Te ayude en algo, quédate en mi oficina para que comas y vayamos a la siguiente sesión.

Ella asintió y yo seguí en mi trabajo.

(...) 

La sesión de las cremas estuvo bastante bien, a pesar de que ella es una principiante, lo hizo muy bien. Ella se había ido al departamento con Azael, mientras que yo me quedé en mi oficina a terminar el trabajo pendiente. No me gusta tener absolutamente nada atrasado y Azael prefiere dejarlo todo para última hora.

—Señor Praxton, la señorita Chesiree lo busca.

—Hazla pasar por favor.

Mi secretaria asintió y le dio el pase, Chesiree entró contoneando las caderas, caminó hasta mi y se sentó en mi escritorio.

—¿Que quieres?

—Vine a verte querido, hace mucho que no la pasamos bien —se recargo sobre el.

—Pues no tengo tiempo para esas cosas ahora.. Así que si no son cosas del trabajo, puedes irte.

—¿Que pasa Damian? Antes nos divertíamos..

—Antes, ahora no tengo tiempo para eso, además de que tengo prometida.. Ahora bájate de mi escritorio.

Su sonrisa se borró y se bajó de mi escritorio, no me gusta ser grosero con las mujeres y mucho menos tratarlas mal pero me molesta cuando se ponen en plan de ofrecerse, si yo no estoy de acuerdo no me gusta que me insistan o se me insinúen, es algo que me incomoda demasiado.

—¿Prometida?

—Lo que escuchaste, voy a casarme y espero que ya pares con eso, respetate un poco por favor.. Te repito, si no es de trabajo, puedes irte.

Tomó su bolso y salió de mi oficina. Sinceramente no me dieron ganas de estar con ella, ya no. Hace tiempo que no estoy con una chica y creo que estoy bien así, además de que no tengo tiempo para eso, mi vida es muy ocupada y pienso que estar con alguien es una perdida de tiempo.

Ya era la hora de salir, eran las ocho ya y estaba el trabajo hecho, de igual forma mañana había mucho que hacer. Ya todo estaba cerrado y yo listo para irme. Subí a mi auto y conduje hasta el departamento. Hoy sentí que de verdad tenía que descansar llevaba trabajando meses en el proyecto de Chesiree y las cremas, sinceramente es tedioso hacerlo, pero soy un maldito competitivo y mi meta es mantener a la compañía en el puesto uno de marketing y publicidad, esa es mi meta ahora.

Llegando al departamento escuché las risas de Gina y Azael, ambos estaban en el área del comedor bailando o bueno, intentando bailar.

—Soy pésimo en ésto —rió.

—Dejame decirte que si, pero sigue intentándolo, vamos es sencillo.

Ambos estaban bailando algo parecido al Rock and Roll, Gina perdía su tiempo, Azael tiene dos pies izquierdos y el bailar no es su fuerte, lo hace de la m****a, aunque yo no me quedo atrás, tampoco se bailar.

La música paró ya que ambos se percataron de mi presencia.

—Te estábamos esperando, Gina hizo la cena.

—¿Sabes cocinar?

—Si señor Praxton —sonrió— soy la mejor.

—Eso hay que verlo —alce una ceja y ella rió un poco.

Azael se fue por el pasillo, supongo que a su habitación mientras que yo seguí a Gina hacia la cocina donde sacó todo lo que preparó, quedé atónito cuando vi que hizo pastel de pollo con verduras, mamá solía prepararlo en ocasiones especiales.

—Espero que sea de tu agrado, Azael me dijo que te gusta mucho el pastel de pollo —sonrió.

—Si.. Es.. Es mi favorito.

—¿Estás bien? —se acercó a mi.

—Si, es que estoy un poco cansado, hubo mucho trabajo —ella asintió— iré a ducharme.

Tomé mi saco y me dirigí a mi habitación, no sabía cómo sentirme con eso, aún a años de la muerte de mi madre jamás pude pedirle perdón por lo cruel que fui con ella en aquel momento. No supe valorar el amor que me daba, yo solo la alejaba de mi porque pensaba que estar casada con dos hombres estaba mal, siempre se lo reproche porque siempre he sido de mente muy cerrada y jamás comprendí el porque mi madre lo hacía, siempre fui cruel y distante y ella aún así seguía queriéndome y cuando se fue a causa de esa enfermedad, no pude pedirle perdón por haber sido un mal hijo con ella.

Todo por mi enorme orgullo y traumas estúpidos. Estaba molesto cuando era un niño, un niño al que sufrió acoso solo por tener un par de padres y una madre, por eso me molesta demasiado Gina, el estar con ella me frustra demasiado. 

El que Azael le dijera a mi papa que estábamos con la misma mujer, me frustraba demasiado, me ponía muy molesto por que no quiero recordar esos momentos.

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