Valentina, dos meses antes de morir:
Marko se mostraba tranquilo, nada sorprendido por las palabras de Rosa. De hecho, él ya lo veía venir. Después de todo, sería muy extraño que Valentina lo perdonara tan fácilmente después de asesinar a su prometido.
—Quiere matarte —advirtió la mujer.
—Está enojada, eso es todo, pero Valentina no es capaz de asesinar a una persona —dijo él y después tomó un sorbo de su copa.
Rosa soltó un jadeo y después echó atrás su corto cabello negro con una mano.
—¿De verdad crees que Valentina no será capaz de hacerte daño? —cuestionó—. Conozco a mi hermana y sé perfectamente que sus palabras son advertencias de lo que hará. —Acercó su rostro a él—. ¿En qué momento me he equ