— ¿Oliver Cayetano, verdad? — Un hombre se acercó, extendiendo la mano en señal de saludo.
— Soy el doctor Tasio Duarte, mi secretaria me dijo que usted ya había llegado, así que vine lo más rápido posible.
— Oh, sí. Mucho gusto en conocerlo, disculpe por llegar tan temprano, es que estoy un poco an