Leah:
No sabía realmente si aceptar a cenar con el, era lo correcto. Por un lado lo deseaba, quería cenar con el. Quizá por agradecimiento, hizo sonreír a mi pequeña, le trajo cosas deliciosas, le leyó un cuento.. Sin poder evitarlo lloré al verlos, porque así era Zack con Roxanne.
Ahora ya no queda nada de eso.. Ya no es el padre amoroso qué solía ser, ya no la llama, no la busca y eso me duele mucho.
Hoy era un buen día, a pesar del espectáculo qué armó Zack anoche, estoy de buen humor.
Desde el banco del parque veía a mi papá correr con Roxanne y la pelota.
—Entonces cenarás con el italiano —Samara y yo comíamos un helado.
—Si, acepté a cenar con el, también pasó algo más.
—¿Ah si? —asentí— ¿Que pasó?
—Nos besamos —murmure.
—No puede ser —dijo asombrada— tiene que ser una broma ¿es una broma?
—No es una broma Samara, de hecho fui yo quien lo besó —suspiré— sigo pensando que fue mala idea hacerlo.
—Estoy sorprendida, debo admitirlo.. Pero esta bien que lo hayas besado, si lo hicist