Channel se enoja tanto, que ordena sacar todas esas rosas de su oficina y que las voten a la basura.
Piensa en que si llega a ver a Mateo, lo pondrá en su lugar, ella fue amable con él al decirle que no quiere nada con él porque ama a su esposo, pero al parecer, Mateo no lo entiende, y es que Channel ya no quiere más interrupciones en su relación con Fabrizio, ya que se quitó a Aida de encima.
Channel trata de calmarse, quiere atender bien al italiano, ya que para ella sería grandioso llegar a un acuerdo con él.
—señora, el italiano ha llegado, ¿Lo hago pasar?
—Si. Y trae algo de tomar, otra cosa Pati, si llega Mateo no lo dejen entrar, dile al de seguridad, necesito concentrarme
—como ordené, señora Hoffman— Pati sale de la oficina y le informa al italiano que la jefa está lista para atenderlo
Él ingresa y Channel traga grueso, ya que es muy simpático para su gusto, pero retoma su compostura, está casada, y ama a Fabrizio, solo que apreciar la belleza del prójimo para ella no está