Al martes siguiente, 2 de enero volvieron todos a trabajar.
Barbie no le contestó ningún mensaje a Charly, tampoco le devolvió ninguna llamada, tenía miedo de llorar por lo mal que estaba y decidió rumiar la pena sola, el 1º de enero ni siquiera se pudo levantar del dolor que le cubría todo el cuerpo.
Para ir a trabajar se tuvo que maquillar muchísimo, para poder ocultar la marca del cachetazo, tenía cinco dedos marcados profundamente en su mejilla, también se puso una blusa de mangas largas y pantalones largos, para ocultar los tremendos hematomas, ya violetas, que tenía desparramados por todo su cuerpo.
Las dos amigas se vieron en la parada de colectivo, Oscar pasó a buscar a Barbie y Fredy
a Loana.
Ellas se miraron y comprendieron que las dos las habían pasado mal, en cuanto Fredy la empujó levemente para que subiera primero al colectivo, Barbie lanzó un grito involuntario y arriba del colectivo, le exigieron saber que tenía, ella les contó, tratando de no llorar para que no se le