23. Un centro comercial hasta el tope
El centro comercial está repleto, llevamos quince minutos intentar encontrar un estacionamiento libre, y nada.
—¡La recontraputa! ¡¿Cuándo piensan hacer otro piso con estacionamiento?! —Ya hace un rato que Lottie ha empezado a soltar improperios.
Lottie parece estar a punto de bajarse del auto y salir corriendo hacia un baño, pero se detiene al ver que, desde la lejanía, un auto empieza a salir. El rostro concentrado y decidido de Valen puede apreciarse desde el retrovisor central, como si esperara el «Lets. Go» en una carrera de auto, y es que del otro extremo también hay otro auto esperando por el mismo estacionamiento.
—Ese es el tuyo, prima —Lottie la anima en un tono bajo y con unas palmadas en su hombro.
El otro auto no ha terminado de salir del estacionamiento, cuando Valen lleva hasta el fondo el acelerador del auto haciendo que derrape y chille contra el concreto del estacionamiento.
—¡Sí, lo tenemos! —todas gritamos emocionadas al ver cómo le ganamos el estacionamiento al ot