Al día siguiente salí súper temprano del apartamento, necesitaba ayuda para acercarme a Alessio, y el único que me podía ayudar con eso era Octavio.
— ¿Que haces aquí? — Me preguntó Octavio.
— Ayúdame — Le pedí.
Él nego con la cabeza de inmediato.
— Ni siquiera te he dicho de que trata —
Octavio se encogió de hombros.
— No quiero problemas con Gross — me dijo.
— ¡Por favor! — Le pedí.
El me quedo mirando.
— ¿como entraste en la empresa? — Me preguntó.
— La recepcionista me dejó pasar — Le conté.
Él puso los ojos en blanco.
— ¿Que quieres Lorena? — Me preguntó.
— ¿sabes dónde puedo encontrar a Alessio Moretti? — Le pregunté.
— ¡Estás loca! — Me dijo con mal humor.
— Por favor, necesito hablar con él — Le suplique.
Octavio miró sobre mi hombro, yo voltee y allí estaba Donovan mirándonos.
— ¿Para que quieres hablar con Moretti? — Me preguntó.
— Necesito preguntarle muchas cosas, solo pido ayuda — Le dije.
Donovan se acercó a mí y me agarró del brazo acercándome más a él.
— ¿De dónde lo