CAPÍTULO 7
—Se supone que ellos dos no deben estar juntos. Nos descuidamos un día y ya están en Miami juntos pasándola como dos amantes. O esa es la sensación que me dio—Gabriel, el amigo de la universidad de Sky, parece realmente indignado y al borde de la desesperación tras enterarse de que ella y Kim Seon Ho está con ella.
James tiene algo en mente: enviarlo de nuevo al infierno.
El hombre se bebe su café mientras mira por el ventanal mientras ve a la gente pasar detrás del cristal. No dice nada, está serio.
Frente al chico pelirrojo lo único que puede llegar a pensar es que tuvo que recurrir a otro mandado de Dios para saber qué iba a pasar con el caso de Sky, su alumna.
Gabriel y James no son del todo humano.
Están en la vida de la joven no de casualidad, sino a propósito para mantenerla vigilada y lejos de Kim Seon Ho.
Que un demonio se enamore de un ser humano es algo peligroso. Porque cuando los demonios se obsesionan…
—Saqué un pasaje para ir a Miami mañana por la mañana. Har