Andrés inicialmente pensaba llevar a Sonia de regreso a Villa Azulejo.
Pero por alguna razón cambió de opinión y la llevó directamente a la empresa.
No era la primera vez que Sonia visitaba CUMBRE.
Pero sí era la primera vez que Andrés la llevaba tomada de la mano tan abiertamente.
Precisamente por este gesto, casi todos los miraban al pasar, aunque debido a la posición de Andrés, nadie se atrevía a observarlos descaradamente. Al final, esas miradas "furtivas" terminaron cayendo sobre Sonia.
Ella se sentía incómoda y trató de soltar la mano de Andrés.
Pero parecía que él quisiera llevarle la contraria a propósito: cuanto más intentaba ella liberarse, más fuerte la sujetaba él.
En público, ella no podía forcejear con él, así que finalmente Sonia se rindió, optando por ignorar silenciosamente aquellas miradas mientras lo seguía hasta la oficina.
Cuando Andrés le dijo a Fabiola que no tenía tiempo, no era una excusa.
Había estado fuera varios días y se le había acumulado una montaña de tr