Mundo ficciónIniciar sesiónSofía está a punto casarse cuando descubre, en último momento, a Lucas, su prometido paralítico, y a su propia tía Emily, besándose en la tienda la boda. Conmocionada, decide cancelar la ceremonia. Ese mismo día, tiene un encuentro fortuito con Liam, el encantador hijo de cinco años de Noah, un multimillonario con importantes inversiones en propiedades y otros negocios. Después de una noche de fiesta y excesos, Sofía se despierta para descubrir que se ha casado con Noah. Aunque ella desea divorciarse, Noah insiste en que su hijo necesita una figura materna, lo que los lleva a pasar tiempo juntos y a enamorarse gradualmente. Sin embargo, su camino hacia la felicidad no será sencillo, ya que siempre habrá obstáculos que enfrentarán. Sofía y Noah deberán superar los desafíos que se les presenten mientras luchan por mantener viva su historia de amor. ¿Qué secretos oculta la misteriosa tía Emily? ¿Cómo afectará la ambición a sus vidas? ¿Qué revelaciones sorprendentes les esperan en el camino? ¿Podrán mantenerse juntos pese a todo?
Leer másC1 –VIVIENDO UNA MENTIRA.
~*~
Anya, era médica en el hospital más prestigioso de Chicago y en ese momento estaba inclinada sobre Mateo, un niño con dolor de estómago. Le presionaba el abdomen con cuidado mientras lo guiaba para que respirara con ella.
—Respira profundo —susurró.
El niño apenas alcanzó a asentir cuando, de pronto, las puertas se abrieron de golpe. Dos paramédicos entraron empujando una camilla y sobre ella, una mujer embarazada gritaba de dolor.
—¡Anya, prepárala! ¡Ya viene el bebé! —ordenó el doctor de guardia.
De inmediato, ella reaccionó en automático. Ajustó monitores, acomodó a la paciente y le secó la frente húmeda, mientras la calmaba. Pero la mujer solo pronunciaba un nombre con desesperación.
—Levi… ¿Dónde está mi esposo? ¿Dónde está Levi?
El corazón de Anya se detuvo, porque ese nombre la atravesó como un cuchillo, no obstante, le calmó.
—Ya viene… tranquila.
Mientras tanto, el doctor revisó sus signos vitales y habló con tono urgente.
—Está completamente dilatada. El bebé ya viene.
Anya le apretó la mano para darle apoyo.
—¡Puja, ahora!
El grito de la mujer llenó la sala de partos y Anya intentó mantenerse firme, pero el eco del nombre seguía retumbando en su cabeza.
Levi.
Y como si el destino quisiera aplastarla, un enfermero anunció.
—¡Llegó el padre!
La puerta se abrió y entonces lo vio.
Era Levi… Su esposo.
El aire se le cortó de golpe y los oídos comenzaron a zumbar. Lo observó avanzar con paso decidido hacia la camilla. Él no la vio, ni siquiera sospechaba que estaba allí, porque se suponía que estaba en casa. Y con total naturalidad, tomó la mano de la paciente y se inclinó hacia ella.
—Estoy aquí, mi amor. No te dejaré. —musitó besándole la frente con ternura.
Anya no podía procesarlo. ¿Esposo? ¿Cómo era posible?
—Levi… tengo miedo —murmuró la mujer.
Y el, la acarició con suavidad.
—Todo estará bien, no voy a dejarte.
Mientras tanto, Anya permanecía a menos de un metro, invisible, sosteniendo la otra mano de la mujer. La garganta le ardía por gritar, por decirle que estaba allí y exigirle una explicación.
Porque Levi también era su esposo y el padre de su hijo.
De pronto, el doctor volvió a interrumpir con otra orden.
—¡Necesito que pujes más fuerte!
La mujer gritó otra vez y Levi la animó sin soltarla.
—Vamos, cariño, hazlo por nuestro bebé.
El golpe emocional fue devastador. La razón es que cuando nació su hijo, Levi se había negado a entrar al quirófano, afirmando que se desmayaría y que confiaba en ella podría sola.
Anya lo había aceptado, convencida de que lo importante era traer al niño sano. Pero ahora lo veía allí, sosteniendo la mano de otra mujer, dándole todo lo que a ella le negó.
Finalmente, tras un último empuje, el llanto del recién nacido llenó la sala.
—Es un hermoso niño —anunció el doctor.
Y Levi lo recibió en brazos, con los ojos brillando de emoción.
—Lo lograste —susurró. Besó primero al bebé y después a la mujer—. Te amo.
En ese instante, el estómago de Anya se contrajo con fuerza, la mascarilla comenzó a sofocarla y las luces la cegaban. Retrocedió un paso y luego otro y salió tambaleando del quirófano.
El aire frío del pasillo le golpeó el rostro y, sin pensarlo, se echó a correr. No se detuvo hasta que las fuerzas la abandonaron y se apoyó contra la pared y vomitó.
El ácido le quemó la garganta, las piernas le temblaban, sintiendo que todo su mundo se desmoronaba.
En ese estado la encontró Clara, una compañera.
—Anya… ¿estás bien?
Negó con la cabeza.
No, no estaba bien, porque acababa de descubrir que había estado viviendo una mentira.
A la mañana siguiente, Sophia se despertó sumamente temprano, con los primeros rayos de sol colándose por la ventana de la habitación.El encuentro de la noche anterior todavía era un peso en su mente y su corazón latía con fuerza al recordar la confrontación con Lucas y su tía. A su lado, Noah dormía apaciblemente, ajeno a la tormenta que se desataba en el interior de Sophia. Con cuidado, se levantó de la cama y se encaminó hacia la cocina, con la intención de preparar el desayuno, en un intento de encontrar un poco de normalidad en medio del caos de su vida.Mientras batía los huevos y el beicon se asaba en el sartén, su mente no dejaba de divagar sobre la amenaza que había recibido. Era más que consciente de que no podía subestimarlos, por lo que, si quería proteger a Liam, a Noah, a sí misma y a la fundación. Se sentía sumida en una encrucijada: por un lado, debía adaptarse a su nueva vida con Noah y Liam, a la vez que se enfrentaba al miedo constante de las amenazas que, como una
El taxi avanzó a toda velocidad por las desiertas y oscuras calles de la ciudad, mientras Sophia miraba por la ventanilla, con la mente hecha un manojo de pensamientos y emociones. Era consciente de que se estaba metiendo en un terreno sumamente peligroso, pero le era imposible quedarse de brazos cruzados, mientras su tía Emily y Lucas continuaban conspirando en su contra.Una vez que el taxi se detuvo frente a un edificio abandonado a las afueras de la ciudad, Sophia se apresuró a pagarle el viaje al taxista y se bajó del coche, mientras respiraba profundamente intentando calmarse y miraba a su alrededor, asegurándose de que no hubiera nadie a la vista, antes de dirigirse a la entrada de lo que supuso que antiguamente se había tratado de una fábrica.La puerta chirrió sobre sus goznes al abrirse, mientras revelaba un oscuro y polvoriento vestíbulo. Sophia rápidamente encendió la linterna de su móvil y comenzó a adentrarse con cautela, procurando no hacer ni el más mínimo ruido. Sin e
Sophia ya estaba demasiado cansada de todo lo que estaba viviendo. Cada día se le hacía más difícil sobrellevar el hecho de no recordar, pero, sobre todo, el hecho de estar en riesgo constante. Muchas veces se había planteado, si es que ella tenía miedo a morir y la verdad es que no era así, sino que temía hacerlo, porque eso significaría que dejaría solos a Noah y a Liam y no sabía muy bien por qué, esos dos se habían ganado su corazón en muy poco tiempo. No sabía si antes había sentido aquello por ellos, pero si así había sido, habían logrado conquistar su corazón otra vez. Aquella mañana, se levantó más temprano de lo habitual, adelantándose a Noah. No quería llamar su atención. Durante toda el día anterior, había pensado en una posibilidad con la que podría resolver aquel misterio, sin que su vida corriera peligro. '¿Es que acaso no estás poniendo tu vida en riesgo ahora mismo?», se preguntó, siendo consciente de lo que estaba a punto de hacer; lo que era prácticamente mete
¡Hola, mis bellezas! ❤ ¿Cómo están? Espero que muy bien. Les pido disculpas por la demora en actualizar, he tenido problemas de índole personal y no he podido escribir como me gustaría. ♥ Sin embargo, les prometo que en breve volverán las actualizaciones. Aunque mucho más relajada. ♥ Me he dado cuenta que estaba desgastandome y perdiendo el toque por presionarme al extremo. Espero que lo sepan entender. Por lo pronto pueden leer los otras novelas. La última publicada aquí está finalizada, por lo que simplemente tengo que subirla. ♥ Se les quiere muchísimo. ♥✨😍😍 Gracias por la paciencia 😍😍 I love U!!
UNA SEMANA DESPUÉS.Siete días más tarde, Sophia, Noah y Daniel se encontraban en el despacho de este último, el cual estaba abarrotado de nuevos archivos y documentos. El trío se encontraba aún más inmerso en la misión en la que se habían embarcado para desentrañar los oscuros secretos de la fundación.Durante los últimos días los tres se habían dedicado a entrevistar a más empleados, los que en su momento habían descartado ante la creencia de que ellos no tenían ninguna relación con lo que estaban buscando.Sin embargo, las historias que les contaban eran desgarradoras: corrupción, malversación de fondos, traiciones… Cada uno de los testimonios revelaba una pieza más del intrincado rompecabezas frente al que se encontraban.—Parece que cada uno de los ex empleados de la empresa tienen su propia versión de los hechos. ¿Cómo vamos a conseguir la verdad si todas las versiones se contradicen? —preguntó Sophia, alzando la mirada y apoyándose sobre el escritorio, soportando el peso con s
A la tarde siguiente, Sophia y Noah se habían dirigido, nuevamente al despacho de Daniel y ambos esperaban con ansias que les dijera de una vez qué era lo que pasaba. El ambiente estaba lleno de tensión. Ninguno de los dos sabía por qué los había citado de manera tan urgente. —Gracias por venir tan rápido —dijo Daniel, mientras abría la puerta y los invitaba a pasar. —Daniel, ¿qué pasó? —preguntó Sophia. Noah la secundó:—Eso, ¿qué sucede? ¿Qué has descubierto? —Creo que hemos estado enfocándonos en la dirección incorrecta. —¿A qué te refieres? —lo interrogó Sophia con el ceño fruncido, mientras tomaba asiento frente al escritorio de Daniel—. Hemos estado siguiendo las pistas que hemos recabado. ¿Por qué deberíamos dar marcha atrás? Estaba realmente confundida. —¿Crees que hay algo en los orígenes de la fundación que pueda estar relacionado con los ataques a Sophia? —preguntó Noah, con curiosidad. —A eso mismo me refiero. —Daniel asintió—. La fundación ha estado operando duran
Último capítulo