P.O.V Larissa
Han pasado ya dos meses. Ahora tengo cuatro meses. Ya mi vientre se ve muy abultado. Pero Calem está muy impaciente porque no lo he dejado ver al bebé. Le digo que es una sorpresa para la revelación de género.
Hoy va a llegar mi familia. Todos estamos esperándolos en la entrada. Veo que entran los autos. Estoy feliz de ver a mis padres. Los aires se estacionan. Mi madre corre enseguida a abrazarme y yo a ella. Después, mi padre.
—Mira qué linda te ves, mi niña —me dice mi madre muy feliz.
—Sí, mi hija se ve hermosa —agregó mi padre.
—Gracias, papás —les respondo. En eso voltean a saludar a Calem.
—Hola, Calem. —Mi madre me da un abrazo.
—Hola, señora Anabela —le contesta Calem.
—Hola, Calem —lo saluda mi padre.
—Hola, señor Vladímir. —En eso escuchamos un grito.
—Ah. —Volteamos a ver de dónde proviene ese grito. Es mi prima Kira. Que está ayudando a levantar del piso a Burak. Mi tío Francisco acaba de darle un golpe a Burak en el rostro. Burak se levanta y le e