Thiago no ocultó la verdad y admitió que fue Isabela quien le abofeteó y preguntó a Claudio si se atrevía a enfrentarse a Isabela.
Claudio se paralizó un instante al oír esto, y luego comentó con una sonrisa postiza: —Así que es Isabela, ¿ha venido a verte? ¿Para qué te busca? ¿Por qué te ha pegado? Uy, te ha pegado tan fuerte, mira, ya tienes media cara hinchada.
—Thiago, ahora ya sabes qué tipo de persona es Isabela. Normalmente parece que no le importa nada, pero en realidad es despiadada. Es ciega pero es tan viciosa, que cuando se cure los ojos, me temo que sólo irá a peor. En ese momento, puede que ni siquiera te deje una salida.
—No olvides que tus padres mataron a su padre. No se sabe si la tomará contigo porque odia a tus padres.
—Y no creas que ahora está actuando con sinceridad contigo. En mi opinión, lo hace para que bajes la guardia y, cuando llegue el momento, te acabrá y te dejará sin nada. Quizá también te incite a hacer algo ilegal hasta que te denuncie y te mande igua