Henry movió los párpados y no respondió durante un buen rato.
En el momento en que Clara cayó al suelo, su corazón se agarrotó por un instante, pero la sensación fue como ondas de agua que se alejaban en círculo antes de que no quedara rastro de ella.
Al fin y al cabo, eran una pareja.
No era un animal de sangre fría sin sentimientos.
Al ver el aspecto lamentable de Clara, todos los momentos dulces pasaron por su mente ...
—Busca primero un médico y que el venda a la reina.
Simón se quedó helado, luego asintió e hizo lo que le decía.
Pronto rescatan a Clara, le detuvieron la hemorragia de la cabeza y la llevaron a su alcoba para que descansara, sólo que estaba rodeada de fuertes guardias y ya no podía salir libremente.
Simón miró a Henry, el rostro del viejo monarca cansado, sus ojos sin brillo por el infinito odio a sí mismo y la desesperación.
—Su Majestad—Simón hizo una leve reverencia—, cuando la reina se encuentre mejor, vendrá el personal de la judicatura a llevársela, aún quedan