Continuación del Dia que te perdí… Con el paso de los años, David y Gloria están juntos y se aman profundamente, hasta un fatídico día… David decide irse llevándose un secreto doloroso y dejar que Gloria sea feliz con alguien más, Gloria que no deja de amarlo lucha por olvidar ese gran amor de años, pero siempre tiene esa incógnita del porque David se fue y la dejo. Conoce más de su historia y de los hijos de Marina, Erick y sus amigos.
Leer másCiudad Malvinas al norte de México.
La ciudad había cambiado, había más locales comerciales y edificios que se crearon con los años, el lugar con una hermosa playa se había convertido en una gran metrópoli moderna, mucho de esto fue influenciado por la familia Estrada Varela que tenía muchas de sus sucursales alrededor de la urbe.
Erick había creado un emporio de varios rubros diferentes, entre restaurantes, centros comerciales, hospitales, fábricas de artículos de diferentes electrodomésticos, entre otros, tenían centros de investigación de ciencia y tecnología que traía frutos a diario, había ayudado a que la gente del lugar tuviera una oportunidad de trabajo y salir adelante con sus familias, muchas otras personas llegaron a la ciudad y se quedaron a vivir por las buenas ofertas de trabajo que se ofrecían.
Hoy ESTAMONGRUP se había convertido en lo más importante de la ciudad y la familia Estrada Varela era muy conocida entre la gente por ser amables y generosos.
Con el tiempo Erick y Marina compraron algunas casas alrededor del viejo vecindario donde vivían, convirtiendo la calle en privada, toda la familia seguía ahí, Miranda y Dante con sus hijos, Dinora y Alonso también eran vecinos, habían convertido muchas de las propiedades en grandes jardines que comunicaban las casas de los tres, todos los niños crecieron juntos eran como hermanos.
Miranda seguía ayudando a las personas necesitadas, Dante había abierto un despacho de contadores junto con su madre, trabajaban para las empresas cercanas en especial para ESTAMGROUP.
También ambos ayudaban a administrar el centro con Miranda, ahora que también su hija era mayor Keila sería pronto la que se dedicara al centro dándole a su madre tiempo para estar con su papá, ellos habían trabajado duro todos estos años, su abuela también quería ya retirarse, Keila estaba lista y preparada para tomar la b****a de la organización.
En un bar por la noche. “¡Chicas es hora de celebrar, mañana se terminará mi libertad!”.
Las dos chicas que la acompañaban rieron, una de ellas, Vicky hija de Dinora y Alonso se burló. “Y ahora qué haremos sin ti”. Hizo un profundo puchero, Gloria que estaba riéndose de ambas le dijo a Vicky. “¿Cuándo has necesitado de nosotras para divertirte?”.
Vicky rodó los ojos. “Ustedes dos siempre están ocupadas y Luka siempre me ignora, ¿Qué más puedo hacer? Tengo que divertirme”.
Gloria observó a Vicky había estado enamorada de Luka uno de los gemelos de Marina desde niños, siempre lo seguía, pero él la ignoraba todo el tiempo.
Llegó otra chica robándole el trago a Vicky. Ella refunfuñó. “Oye”.
Al terminar el trago la chica hizo un gesto de satisfacción. “Lo necesitaba”. Las tres chicas la miraron detenidamente, era Mar la hermana gemela de Luka.
Gloria intrigada preguntó. “¿Ahora qué pasó?”.
Mar hizo una mueca. “El maldito de mi hermano y su dedicación a la compañía, quería que me quedara horas extra para terminar asuntos que podíamos hacer mañana, me gusta estar en la empresa, pero él de verdad que es un maniático del trabajo”.
Vicky escuchó atenta y suspiró, era cierto, Luka Estrada se dedicaba a la empresa 24/7 no tenía tiempo de pensar en otra cosa más que en trabajo.
Mar ya más relajada observó a unos chicos que las saludaban, le dio un codazo a Vicky para que los mirara y ella giró para verlos sonriendoles.
Gloria y Keila se miraron tácitamente y negaron, no eran muy afines a salir con chicos extraños, en cambio, Mar y Vicky disfrutaban en los bares juntas.
Alonso el padre de Vicky trabajaba en la empresa con Erick como su mano derecha, Dinora era diseñadora de modas y se encargaba de una de las empresas asociadas con los Estrada.
Vicky era cantante profesional y modelo. Pero había dejado su carrera para trabajar con su madre en la empresa.
Los dos chicos se acercaron y saludaron a todas, uno de ellos giró para ver a Mar. “¿Quieres bailar?”.
Mar le sonrió coqueta y asintió, al caminar les mando un beso a las chicas despidiéndose, no la verían en toda la noche, el otro chico miró a Gloria. “¿Quieres bailar?”.
Cuando Gloria estaba a punto de negarse, Vicky le dijo al chico. “Ella tiene a alguien, si quieres bailamos juntos”.
El chico miró a Vicky era muy linda. “Ok”. Ella y el chico se fueron a bailar.
Keila suspiró recargando su cara en su mano. “¿Por qué no puedo ser así de atrevida? Me gustaría conocer a alguien lindo”.
Gloria sonrió recordando a David.
Keila miró a su amiga y le dio un codazo. “¿Estás emocionada porque va a volver?”.
El rostro de Gloria se iluminó y asintió. “Mañana a primera hora estará aquí”.
En el mismo bar en una sala VIP, un joven observaba a las mujeres conversar, tomó su trago y sonrió, en la misma sala había otras dos personas, Un hombre muy mayor y otro joven.
El que veía a las chicas le dijo al otro. “Son muy lindas… ¿No te gustaría invitarlas?”.
El hombre mayor resopló. “Adrián… no es el momento”.
Adrián entró a la sala y se sentó junto al otro mirándolo le preguntó. “¿Estás aburrido?”.
El joven negó. “Tengo una operación mañana”.
Adrián resopló. “Acabas de llegar al país y ya tienes trabajo”.
El joven sin mirarlo le dijo. “Me gusta mi trabajo”. Estaba usando su teléfono leyendo informes sobre la operación que realizaría al día siguiente.
El hombre mayor suspiró, estaba cansado y fastidiado del ruido, solo había acompañado a los jóvenes porque sabía que estarían las chicas aquí. “Me voy a descansar, disfruten la noche, pero te quiero mañana a primera hora listo Adrián”.
El hombre asintió respetuosamente. “Claro señor”.
El hombre mayor salió, cuatro hombres lo seguían al parecer eran sus guardaespaldas.
Los jóvenes se quedaron solos, había un gran silencio y Adrián suspiró. “Sabes Fer… no entiendo porque somos amigos, eres un aburrido y yo necesito divertirme”.
El joven dejó su teléfono y miró a su amigo. “Te dije que mañana estaré ocupado, pero insististe en que viniera”.
Adrián tomó otro trago y refunfuño. Volvió su vista hacia las chicas y miró detenidamente a Gloria.
Más adelante antes de llegar David le dijo. “Todo lo que hice… fue por ti, porque estúpidamente pensé que estarías mejor sin mí, pensé que tendrías una buena vida cuando yo me alejara y no te arrastrara a mis problemas”. Gloria hizo una mueca. “¿Por eso me hiciste creer, que era porque no podía tener hijos?”. David se quedó en silencio para después de unos segundos decir. “Lo siento”. Gloria se burló. “¿Lo sientes? ¿Crees que eso termina con mi dolor? ¿Lo que me hiciste pasar el día de tu boda? Todo tu rechazó, Casarte con otra mujer, ¿Crees que es algo que puede olvidarse tan fácilmente?”. Ella suspiró cubriéndose la frente. “Sabes… Toda mi vida desde que te conozco has decidido por mi… Donde vivía, donde estudiaba, mis maestros, mi ropa, a donde iba… ¡Todo! Lo tenías todo previsto antes de que yo pensara que hacer, hasta las decisiones de nuestra relación tú siempre las tomabas, yo solo seguía tu ritmo, pero siempre eras solo tu… no lo decidimos en pareja”. David se quedó en sil
La dejaron en una amplia habitación donde había algunos cambios de ropa en la cama, antes de salir le quitaron su teléfono. Gloria se acercó a la ventana, había hombres por todas partes vigilando, todos estaban armados. Suspiro para calmarse. Una empleada entró. “Señorita le ayudaré a alistarse para el señor”. Gloria hizo una mueca, tenía que averiguar cómo salir. Afirmó hacia la mujer entrando al baño a ducharse. Mas tarde Gloria bajó, llevaba un vestido corto en color negro, su cabello estaba recogido completamente y llevaba unos aretes largos con una gargantilla a juego, tacones altos negros y maquillaje delicado. Federico la esperaba en el comedor, cuando ella entró, él sonrió jugando con su copa. Gloria siguió a la mujer que la ayudó a alistarse, le dijo dónde sentarse. Federico pidió que sirvieran. “Comamos”. Gloria estuvo en silencio todo el tiempo, se sentía incómoda con las miradas del hombre, uno de los hombres de Federico entró diciéndole algo al oído. Federico manot
Sin darse cuenta David la observaba desde lejos, había llegado al pasillo hace unos minutos y presenció todo, conocía bien a Gloria y sabía lo que la ponía triste, avanzó hasta ella. “Gloria”. Ella regresó a sus cinco sentidos al escuchar la voz de David y giró para verlo. David avanzó hasta ella con una mirada suplicante. “¿Podemos hablar?”. Ella observó al hombre por un momento. “No tenemos de qué hablar”. Dicho esto, caminó a un lado dejándolo de pie solo, David bajó un poco su cabeza, le dolió la indiferencia de Gloria, se giró para verla desaparecer en silencio por el pasillo. Gloria regresó a la habitación de Adrián. La enfermera lo estaba limpiando. “Terminaré yo, gracias”. La enfermera asintió entregándole un balde y una esponja. Gloria empezó a limpiar el rostro de Adrián y su cuerpo, David estaba de pie afuera de la habitación observando a Gloria y lo delicada que era al tratar con Adrián, se dio la vuelta alejándose. Estaban todos reunidos en la habitación de Mar, Mar
Mar se quedó en silencio bajando su mirada. “No sé de qué podríamos hablar…Todo lo dejaste muy claro hace tiempo”. John se acercó a ella. “¿Por qué no me dijiste sobre el bebé?”. Mar negó. “Porque no te incumbe”. John bufó. “Es mi hijo ¿Cómo no me incumbe?”. Mar negó manoteando en el aire. “No es tu hijo, es solo mío”. Ella se peinó el cabello. “Además... Tú estás por casarte ¿No sé qué haces aquí?”. “No puedo dejar que mi hijo nazca sin una familia, no voy a permitirlo, Mar, no me importa lo testaruda y terca que seas, estaré presente para mi hijo ¡¿Entiendes?!”. Mar quería que se fuera. “No es tuyo, es de otro hombre”. John se enojó y se acercó tomando sus mejillas para que lo mirara. “¿En serio? ¿De quién?”. Mar movió sus labios y no pudo pronunciar nada. John sonrió. “Vez, es mío, es de esa última noche que estuvimos juntos”. Ella indignada le dijo. “Si, esa noche cuando me abandonaste sin decirme nada, desperté sola”. John quería que ella entendiera. “Sabías que estuvo
Marina y Erick se miraron y todo quedó en silencio. Marina se acercó a Gloria. “El… se fue hace unas semanas al extranjero”. Gloria frunció el ceño. “Pero… íbamos a hablar… yo le dije que esperara”. Marina apretó su mano. Gloria preguntó. “En qué lugar está? Lo iré a buscar”. Marina negó. “No nos dijo a donde iba, solo llama cada semana para decirnos que está bien”. Gloria se quedó en silencio mirando por la ventana. …………………………………………………………………………………………………………………….. Actualidad… Gloria abrió los ojos poco a poco, su llanto no cesó, ella recordaba todo, y también como el especialista la había hipnotizado para que no recordaba lo que pasó. Sus manos temblaban, Keila se acercó. “Gloria ¿Estás bien?”. Gloria se río triste. “Si”. Ella recordó. “¿Cómo está Adrián?”. Keila hizo una línea con su boca. “Está en terapia intensiva, los exámenes mostraron que le dieron un veneno, afectó drásticamente su salud… lo siento Gloria, no saben si despertara”. Gloria se cubrió la boca. “¿Quién
Gloria no entendía nada miraba a ambos hombres. El hombre se giró para ver a David, se acercó y lo golpeó en la cara, después lo agarró de la camisa. “Mi madre murió de un infarto al ver como llevaban a mi padre preso, todo por tu culpa”. Gloria abrió mucho los ojos. No podía creerlo. El hombre se levantó y sus guaruras empezaron a golpear a David sin control. Gloria lloraba y gritaba. “¡No! ¡Déjenlo!”. Después de unos minutos lo dejaron y todos salieron, Gloria se acercó a David sangraba mucho y estaba inconsciente. “¡David!”. El no reaccionaba. “Gloria le llamaba y gritaba por ayuda, pero nadie le hizo caso. Así pasaron varios días, en donde David era torturado, le habían arrancado algunas de sus uñas, tenía cortes en partes de su cuerpo y muchos golpes que no dejaban ver su rostro, el hombre solo observaba lo que le hacían a diario, un día ya cansado de esto, hizo una mueca y les pidió que se detuvieran. Camino hasta Gloria y la tomó del brazo levantándola. David con sus últ
Último capítulo