C286- UN DRAGÓN TONTO.
C286- UN DRAGÓN TONTO.
Después de una disputa difícil, Drakos finalmente cedió. No le gustaba la idea de que saliera de la habitación, no cuando su salud aún era inestable y cada día contaba. Pero ella no estaba hecha para enjaularse. Y él, por más miedo que tuviera de perderla, lo entendía.
Así que aceptó.
Y ahora estaba en el jardín, recostada contra un árbol. La fiebre no había regresado. El sanador —Helion— lo dijo esa mañana: “Es un buen síntoma.” Además, su embarazo comenzaba a notarse. El bulto bajo su vientre era suave, redondo, y ya podía acariciarlo con la palma de la mano.
La idea de tener a su hijo la emocionaba. Porque ya no era una posibilidad… era un hecho. Esa vida crecía, y crecía.
Sonrió para sí misma y cerró los ojos, dejándose arrullar por el viento.
Pero entonces oyó pasos y abrió los ojos con cautela, y su pecho se tensó al ver la figura que se acercaba.
Gideon.
—Hola —dijo, con voz grave pero suave—. Me enteré de lo de la fiebre.
Ashley intentó sonreír y se sent