_ No me haga reír, Massimo.
_ No es mi intención que rías, Ugo, quiero que negocies conmigo.
_ Eso será imposible, pero, por cortesía te contaré el por qué. La infeliz con qué crees que puedes amenazarme, tiene una deuda millonaria conmigo. En realidad su familia la tiene, su padre y su hermano intentaron pagarme con ella, pero la chica escapo cuando la puse a trabajar en mi nuevo club en Capri. Y dado que la deuda es de los hombres de su casa decidí que no perderé mi tiempo intentando retenerla o domarla. Cuando será mucho más divertido darle una de mis clásicas sopas a su padre y a su hermano o quién sabe si se me ocurra algo aún más divertido._ le dijo Ugo antes de chasquear los dedos y que se acercara a ellos un camarero con una lujosa bandeja portando en su centro un plato de sopa con un aroma exquisito. El camarero lo dejo en la mesa y se retiró de inmediato.
_ ¿Esto que significa?_ le dijo Massimo ya sin tanta arrogancia y seguridad.
_ Es un plato de mi clásica sopa, y signific