C16-ROMPER TODAS LAS REGLAS.

La biblioteca estaba bañada por la luz cálida de las lámparas y Adler se sirvió un whisky y caminó hasta apoyarse en el borde del escritorio.

Gianna había subido con Lily, la pequeña insistió en mostrarle su habitación, y él no se opuso. Era mejor así: que la niña se acostumbrara cuanto antes a su "nueva madre".

—¿Y? ¿Qué piensas? —preguntó Adler, a su madre antes de beber un trago que ardió en su garganta.

Desde el sofá, su madre, Ingrid, lo observaba con ojos astutos, se acomodó en el asiento y suspiró.

—Me gusta —dijo con serenidad—. Me parece una chica muy hermosa y… elegante. ¿De dónde la sacaste, hijo? ¿Es acaso una secretaria o algo?

El vaso crujió en la mano de Adler, y tuvo que llevarse otro trago para calmar la presión en el pecho. No podía decirle la verdad. No podía confesar que la mujer que había llevado a casa, era una prisionera en un mundo de sombras, porque eso la mataría. Ella jamás aprobó a Claudia, precisamente por sus vicios, por