C14-SACRIFICIO.

En su habitación, Margaret sostenía un vaso de agua y Marshall estaba sentado cerca, observándola con el ceño fruncido.

—¿Estás bien?

—¿Crees que voy a estar bien cuando tu hermano piensa casarse con esa mujer? —su voz tembló de rabia mientras se incorporaba—. ¡No, no estoy bien!

Marshall se sentó a su lado y tomó su mano, intentando calmarla.

—Mamá, tienes que dejar de querer controlar la vida de Mason. Ya no tiene diez años, es un hombre y… si eligió a Sara…

—¿Por qué a esa maldita asiática? ¡Priscilla es mejor mujer que ella! Tiene un montón de cualidades.

Marshall se quedó en silencio un momento, respirando hondo antes de responder.

—El corazón no ve cualidades, ve sentimientos. Y por mucho que quieras convertir a Priscilla en tu nuera, Mason no lo hará. Mejor acéptalo de una vez.

—No… —Margaret negó con brusquedad, apartando la mano de su hijo.

—Sí, mamá —insistió él, firme—. Porque el abuelo ya lo sabe y aprobó el matrimonio. Sara Kim será parte de esta familia,