Tan pronto como Natalia llegó a la empresa, se dio cuenta de que la puerta de la oficina de Fabiola estaba abierta.
Sorprendida, se acercó y dijo: —Jefa, ¿cómo es que has vuelto tan temprano?
Fabiola levantó la vista, justo cuando acababa de terminar de escribir todos sus planes, y respondió con indiferencia: —Haz que todos los jefes de departamento vayan a la sala de reuniones para una reunión.
—Entendido.
Viendo a Fabiola tan concentrada en su trabajo, Natalia no pudo descifrar su estado de ánimo.
Se preguntaba si su reciente viaje había ido bien o no.
Vargas había dicho que el marido de Fabiola era un hombre excepcionalmente bueno.
Entonces, ¿por qué Fabiola tendría problemas con él?
Con estas dudas, Natalia convocó a los jefes de los departamentos para la reunión.
—El nuevo serie de Nina se estrena en dos días —anunció Fabiola con un tono frío, mirando a todos los presentes. —¿Están listos?
—Listos.
Respondieron todos al unísono.
Fabiola continuó: —Bien, ahora les diré los puntos a