Llego a casa luego de una buena velada con Aurora y su familia, pero la verdad es que no me deja de dar vuelta lo que vi.
En ese momento me quedé sin reaccionar, una porque ver a Aurora defenderse de esa manera me sorprendió, y la otra porque si yo actuaba, esta es la hora que Lorenzo está en el hospital y yo en la cárcel
Me bajo del auto y entro a casa, donde están mis padres y Lorenzo. Solo ver su rostro me hace empuñar las manos en mis bolsillos, saludó apenas y me voy con rumbo a la escalera, pero todo lo que me contuve para no parecer un loco cavernícola, se esfuma ante las palabras de mi hermano.
-¿Ya volviste de ver a tu noviecita?
Su tono burlón no me pasa desapercibido y me lanzo sobre él, lo tomo de la chaqueta y lo golpeó contra la pared, mi madre da un grito y mi padre trata de separarnos.
-¡Si vuelves a tocarla, te juro que te mato!
-¡