Me pone mal escuchar eso, pero tampoco lo pongo en duda, ya que muchos humanos odian a los licántropos e incluso les tienen miedo, en muchos reinos tienen estrictamente prohibido entrar a excepción de Alessio, por ser un rey, pero si fueran personas de pueblo, la cosa cambia radicalmente. Sus palabras me dejaron pensando y siento que nosotros deberíamos dar el ejemplo, porque… alguien tiene que dar el primer paso ¿no?
—¡No lo decía por ofender! — Grita asustada. —Es solo que… los humanos de aquel momento así eran y y-yo creo que…
—Tienes razón Revann, nosotros los humanos somos destructivos y tendemos a odiar a lo que tenemos, incluso buscamos la forma de acabar con eso, pero te aseguro que no todos somos iguales— Hago una breve pausa y la miro directo a los ojos, ella se nota ligeramente sorprendida por mi semblante sereno o quizás es porque no me he ofendido. —No hace falta ver el pasado de la humanidad, basta con ver el presente, muchos odian a los hijos de Chandra e incluso les te