Deimon:
La cara de abril se descompuso y podía jurar que le faltaba el aire y yo aún no podía procesar lo que estaba ocurriendo
—SI-
hablo el lobo de naim él sonreía tanto que dentro de mi solo había paz él no estaba enamorado de mi mujer pero entonces volví a la realidad
—NO MI HIJA NO-
a naim se le borro la sonrisa de golpe
—¿de que hablas deimon?-
—tú no puedes ser el mate de mi hija por la diosa ni siquiera a nacido ¿y cómo rayos supiste que estaba embarazada primero que yo? no comprendo esto-
él se encogió de hombros
—no lo sé sólo sé que está mañana cuando vi a la luna ese olor me impacto tanto, solo te dire deimon no puedes obligarme alejarme de ella tú más que nadie sabes que a ningún lobo se le niega su mate a menos que ella lo rechace y no me puedes prohibir querer cuidar a nuestra luna ella carga a mi mate y no puedo permitir que le pase nada a ninguna.