C213: Reinhardt quiere que vayas a su oficina.
Fue un beso directo, poseedor, con los dientes rozándole el labio inferior y la mano envolviéndole la nuca para evitar que se apartara. Reinhardt gruñó muy bajo contra su boca y sus manos grandes descendieron por su espalda, la empujaron contra él, haciendo que sus cuerpos se apretaran sin espacio entre ellos. El beso se volvió más torpe, más húmedo, más ansioso. Jordan suspiró, aferrándose a su camisa con ambas manos mientras él la levantaba del suelo con la fuerza de su abrazo.
La cargó sin esfuerzo y la llevó a la cama, sin dejar de besarla. La tumbó de espaldas y se puso sobre ella, apoyando una rodilla al lado de sus piernas mientras le abría la camisa con los dedos toscos. No había paciencia. No buscaba ternura. Reinhardt era brutal en su deseo, pero sin lastimarla. Le besaba el cuello con devoción, bajando por su clavícula mientras ella se arqueaba debajo de él, sintiendo cómo se volvía cada vez más dominante.
La ropa se volvió un estorbo. Reinhardt la despojó de ella como si l