El sol entraba por la ventana y Agatha estaba dormida en la cama, desnuda solo cubierta por una sabana que se enrollaba en sus piernas hasta su espalda baja, su pelo rizado caía por su espalda cubriendo la mitad, su rostro estaba enterrado en una almohada y su mano abrazada a la misma, sus respiraciones eras suaves, signo de un profundo sueño, Azzael estaba despierto sentado contra el respaldar mirándola fijamente con unas sonrisa en su rostro y sus ojos llenos de amor por ella, corrió un rizo que colgaba sobre sus ojos, Agatha se quejó y movió un poco, señal que su sueño se estaba haciendo más ligero, abrió sus ojos pestañando y sus ojos se encontraron con los de Azzael, ella sonrió al verlo – Hola amor – susurró

Hola princesa, como dormiste

Mmm, excelente – Agatha se estiró y se volvió a Azzael se sentó sobre su regazo abrazando su cuello quedando pegada a él, acurrucada contra su pecho, azzael tomó la frazada y cubrió su espalda – y tú?

Bien también – Azzael sonrió mientras sus man