Igor y Sofía descansaban tranquilamente. Ella adoraba despertar en los brazos de su compañero; le daba tanta seguridad.

Un golpe frenético los hizo despabilar más rápido de lo que les gustaba. Sofía conocía ese tipo de golpes en su puerta, y todavía somnolienta, escuchó en su oído:

Igor: -Osita, ¿a quién molestaste ahora?-

Sofía: [Se acurrucó más cerca de su pecho mientras se tapaba con las mantas, intentando ocultarse] -Shhh, ya se va a ir-

Igor la abrazó fuertemente y besó su cabeza antes de levantarse de la cama.

Sofía: -Es temprano, ignóralo- caprichosa como siempre-

Igor: -Habla con tu hermano- [Lanzó una sonrisa] -Recuerda que ya causamos demasiados problemas, esta vez hazme caso-

Sofía: -Solo porque te quiero- Luego se acercó y lo besó en la comisura de los labios.

Igor saludó a Estanislao antes de mencionarle que se había despertado de mal humor. Cuando no la encontró en su habitación y recordó el ataque, supuso que tal vez se encontraba con él, pero nunca imaginó que