—Voy a revisar todo, Luciana. Respira hondo. Puede que solo sea una molestia muscular o algo relacionado con el crecimiento del útero, pero necesitamos asegurarnos de que no sea nada grave.
Alejandro no soltaba a Luciana mientras el doctor hacía los ajustes necesarios y comenzaba a examinarla nuevamente. La ansiedad en el ambiente era palpable, pero Alejandro trataba de mantenerse tranquilo por Luciana.
—Tranquila, amor —susurró, acariciando su rostro—. Estoy aquí contigo. Todo va a estar bien.
Luciana cerró los ojos, concentrándose en respirar, aunque el dolor persistía.
El doctor hizo una serie de revisiones y luego, después de unos momentos que parecieron eternos para ambos, se dirigió a ellos con una expresión más relajada.
—Parece que el dolor que siente, Luciana, es debido al crecimiento de los bebés y cómo están presionando tus órganos. El útero está expandiéndose y, a veces, esto puede causar incomodidades o dolor en áreas como las costillas. No es inusual en embarazos gemelar