—Reconocer tus errores es algo raro hoy en día. Acepto tus disculpas— respondió Juliana.
Para aquellos que podían aprender de sus errores, ella estaba dispuesta a perdonar.
Miró seriamente al joven, ofreciendo algunos consejos adicionales.
—Eres joven, es normal dejarse llevar por las palabras de lo