—¿Qué dijiste?
El joven estaba furioso con Juliana, ya no le importaba la etiqueta y se acercó directamente a ella.
—¿Por qué hablas así de mí? ¿Acaso lo que dije está mal? Eres una mujer, no pareces tan mayor, y aquí, como jueza, nos estás humillando. ¡Te dijimos que te largaras y deberías hacerlo!