Antes de decir cualquier cosa, quiero pedir disculpas a mis lectoras por dejarlas ansiosas por los capítulos. Realmente siento haber dejado esta historia creando polvo, pero no podía seguir escribiendo. Lamento la demora, saben que la vida te da golpes demasiado duros de los que tienes que permanecer un tiempo sanando para volver a dar todo. Mi vida ha sido caótica estos meses. No me podido sentarme a escribir. Ni a imaginar mis propios mundos. Una pérdida de un familiar es algo que te da tan duro, que no sientes ganas para nada. Luchó, me siento orgullosa porque me enseñó lo que es luchar y ahora su estrella es la que más brilla. Voy a seguir su ejemplo, siento la demora, pero espero que sepan entender. Espero que si aún esperan capítulos los disfruten, vendrán más al cabo de los días. Vamos con todo, mis niñas. ¡Hemos regresado!