Liam Jones .

Entre la manada y la empresa, me mantengo muy ocupado. No hay momento para detenerme a pensar en Ava.

A veces siento que he aprendido a vivir en medio de este dolor.

Nunca imaginé que pedirle matrimonio a Mel sería el inicio de mi tormento.

Ha pasado tiempo desde que me dejó plantado en el altar, pero ese momento sigue grabado en mi memoria como si fuera ayer.

Cómo lo voy a olvidar si gracias a esa traición, Ava entró en mi vida.

Sigo amando a Ava,ella es ese sentimiento que cuando se mete en el corazón, no hay quien lo saque.

En algún momento pensé que todo cambiaría, que sería feliz a su lado.

El amor se había apoderado de mí y me ilusioné al pensar que construiría un futuro brillante junto a Ava.

Pero el destino tenía otros planes, y ahora cada quien está por su lado.

Rara vez me afano en traer viejos recuerdos, pero el día de hoy el destino se encargó de meter el dedo en la herida.

Mientras revisaba unos informes en la oficina, mi secretaria entra con una expresión