Ese momento indescriptible en que Lexi estaba en sus brazos y todo era como debía ser. Cuando hundió la cabeza en su pecho con total confianza y él pudo fingir que era el hombre que ella creía ser. Mejor aún, solo por ese momento, pudo fingir que ella era suya.
Tyler respiró hondo y retrocedió un paso, porque primero tenía que soltarse. Era parte del trato que había hecho consigo mismo hacía mucho tiempo para controlar su pequeña adicción a esta mujer.
"No respondiste a mi pregunta". Le sonrió a la luz de la mañana. "¿Qué haces aquí?"
"No lo sé", dijo Lexi, y se rió.
Esa misma risa lo había destrozado —lo había arruinado, para ser honesto— la primera semana de su primer año en la universidad. Lo recordaba vívidamente. Salió de su habitación, abrumado por haber logrado salir de su barrio de mierda y llegar a este lugar histórico, y allí estaba ella. Había estado hablando con otra persona cuyo rostro él nunca recordaba. Solo había visto a Lexi.
Esa risa se le había metido dentro entonce