Naiara y Aziel están en el hotel, trabajando a toda velocidad en la organización de dos grandes eventos.
Se pasaba los días en lo que más le agradaba, ayudar a la gente a cumplir sus sueños y hacerlos realidad en cuanto a sus fiestas y eventos. Un día ordenó algo para una despedida de solteros por internet y venía con un regalo adicional promocional. No hizo mucho caso a esa cajita extra, así que la tiró en su clóset para luego ver qué le habían mandado. Con el pasar de los días y el ajetreo se olvidó por completo de la caja sorpresa.
La tensión entre Aziel y Naiara, seguía aumentando con cada día que pasaba, pero en lugar de sentirse incómodos, ambos disfrutaban de la compañía del otro. La energía era un torbellino entre trabajo y bromas, aunque había momentos en que los ojos de Aziel se desviaban hacia Naiara de una manera que no podía disimular.
En pocos días Aziel aprendió a preparar platillos sencillos, pero deliciosos. Una tarde en la cabaña mientras preparaban algunas cosas par