C37- ¿QUIÉN ES KEEVA?
Gideon se quedó helado por la sorpresa, y el aire pareció trabarse en su garganta.
—¿No... no son hermanas? —repitió, incrédulo.
Melinda negó despacio y luego se dejó caer sobre la hierba, jugando con un tallo entre sus dedos.
—Yo no tengo papás… —murmuró, sin mirarlo a los ojos.
Gideon se agachó frente a ella, esperando que continuara. La niña bajó aún más la voz.
—Y cuando mis abuelos murieron en un ataque a la manada, Eli se hizo cargo de mí… el antiguo Alfa se lo permitió porque la quería como a una hija. Keeva nunca me quiso, pero Eli siempre me defendió. Ella decía que, si era princesa, entonces tenía que cuidar a los más vulnerables, y… yo era la más vulnerable.
Las palabras le salían atropelladas, como si no pudiera detenerlas. Al ver la expresión de Gideon, Melinda abrió mucho los ojos y se tapó la boca con ambas manos en un gesto infantil, como si intentara atrapar lo que ya había dicho.
—¡Hablé de más! —susurró con pánico—. Eli va a matarme…
Gideon no