C19- JUSTICIA SERVIDA.
C19- JUSTICIA SERVIDA.
El desayuno había comenzado como cualquier otro: el tintinear de los cubiertos, conversaciones cortadas y el aroma a pan recién horneado flotando por la sala. Narissa, enfundada en un vestido blanco tan ajustado que parecía pintado sobre su piel, se había sentado junto a Gideon, luciendo su mejor sonrisa de “Luna perfecta”, esa que ensayaba frente al espejo.
Los consejeros hablaban de asuntos serios, y ella asentía con fingido interés, jugando con su copa de jugo como si fuera la anfitriona más refinada del reino.
Pero en el pasillo lateral, Melinda estaba agachada detrás de una columna, mordiéndose el puño para no reír. Sostenía una manzana, moviéndola como si fuera el segundero de un reloj.
—Uno… dos… tres… falta poco para que la bruja pague —susurró, con los ojos brillando de malicia.
Narissa alzó la copa para dar un sorbo, pero un retorcijón seco y punzante en el estómago la hizo tensarse. Forzó una sonrisa, como si nada, aunque otra punzada más intensa la o