Triana se encontraba en la sala de espera de la oficina de policía.Stephan Rider le había ayudado a entrar al lugar, aunque no se había mostrado de buen humor debido al fallo.Pero le había dicho que se encargaría de ello, por lo menos lo haría a cambio de que ella fuese y confrontara a su tía. No perdonaría una equivocación de su parte.Triana, aunque ansiosa, observaba moviendo sus costosos zapatos contra el suelo como un tic nervioso. Fue entonces cuando la puerta se abrió y Triana observó a la mujer, que mostraba una sonrisa al verla.―Sabía que vendrías pronto, señorita Ayesa... ―Ember habló en un tono jocoso, como si la tuviera en la palma de su mano. Nada más lejos de la realidad.―Es obvio que vendría, te has equivocado, soy una mujer condescendiente, pero no me gustan los errores ―a pesar de todo, Triana intentaba mostrar frialdad y profesionalismo.Triana era buena fingiendo. Lo había hecho casi toda su vida, mostrándose como alguien dulce y amable, al menos frente a Alaric

El abrazo se rompió, pero la conexión entre los dos hermanos se hizo más fuerte que nunca. Orión se arrodilló frente a su hermana, tomando sus manos.—El plan no salió como esperábamos, no supimos de tu pasado hasta ahora... pero me alegra que lo hayas hecho, por más doloroso que haya sido —Orión apretó sus manos y la miró a los ojos—. No imaginas lo terrible que fue verte de esa manera, te estabas autolesionando, la policía no podía acercarse. ¿Qué fue lo que viste?Destiny cerró los ojos y respiró profundo. —Vi mi infancia, Orión. Vi todo. El secuestro, la tortura... y también... a mi padre —su voz se quebró al final—. A mi "otro" padre... el que me llevó al orfanato. Pero también vi a mis padres, los Blaine, la mujer que me cuidaba, mi nana... vi cómo me trataban, cómo me amaban y cómo ese hombre hizo todo para que los olvidara.Kael se acercó y se arrodilló junto a sus hijos. —Nos alegra que hayas recordado. Es lo mejor que nos pudo haber pasado. Ahora estamos completos, y nadie s

—¿Estás segura de que estarás bien? ¿Qué no habrá nada que te moleste? Si lo deseas, yo puedo quedarme y podemos enviar a tu padre, tal vez él pueda...—Mamá, estaré bien, ya debes irte, el avión está a punto de despegar —Destiny cortó las palabras de su madre, que parecía no querer irse. Las mujeres observaron a los hombres, que hablaban entre susurros, mientras ellas estaban sumidas en su despedida.—Cariño, ¿qué tanto susurran? —Mara habló en un tono un tanto acusador, mientras Orión y su padre se separaban y negaban al mismo tiempo de manera afanada.—Solo estábamos hablando sobre nuestro plan para Sierra y los Pierce, ya que no serán tan fáciles de manipular y de manejar si Sierra no está dispuesta a ayudarnos...Aquellas palabras pusieron en alerta a Destiny.Ella sabía bien de lo que hablaba Orión, pues le había contado la manera en que había sido criada Sierra, y cómo ella se veía afectada ante las circunstancias.Al ser tratada desde niña como un objeto que solo serviría para

—Destiny... no es lo que crees, Triana solo está confundida...Era curioso ver a un hombre tan frío y magnánimo como Alaric Winter de aquella manera.Para Destiny, aunque era doloroso saber que la amante de su esposo estaba embarazada, era algo que ya se esperaba desde hacía mucho tiempo.Incluso durante sus años de abandono, Destiny imaginó el día en que su esposo algún día llegaría con un hijo en brazos de Triana Ayesa.Al final, sí sucedería de aquella manera, por esa razón Destiny solo le dio una pequeña sonrisa y habló con un tono ameno.—No importa, después de todo, cuando una pareja se ama, es todo lo que se puede esperar... —Aunque su voz sonaba distante y fría, las personas observaban a Destiny, cargadas de tristeza. No podían creer que una mujer tan desafortunada, pudiera tomarse las cosas como una dama. Una chica que se veía tan joven y hermosa, teniendo una vida tan difícil, era sin duda demasiado triste.—Pobre señora Winter, ¿cómo puede una mujer tan descarada hacer algo

—¿Me vas a explicar qué está sucediendo? —La voz de Destiny resonó en la sala de descanso. Orión se mostraba amargo, jamás imaginó que todo sucedería de aquella manera. Su plan estaba arruinado.Destiny notaba la tensión de su hermano, quería hacer más preguntas, pero la que había hecho una y otra vez desde que Alaric se había marchado con el líder de los Riders no había llegado a obtener respuesta de parte de su hermano.—Orión...—Ahora no... —Orión habló de manera tajante ante su hermana. Destiny no podía creerlo, no cuando aquel parecía tan nervioso que incluso llegaba a transmitir aquel sentimiento hacia ella.—¿Cómo que ahora no? Orión, estoy preocupada, dime qué ocurre —Al notar la mirada cargada de temor de Destiny, Orión se sintió terrible, tal vez había sido una mala idea llevarla a aquel lugar.Estaba seguro de que Stephan Rider estaba enojado, el hecho de que Alaric lo hubiese desafiado de aquella manera tan públicamente solo le daría problemas. Sin duda, al día siguiente