Narrado por MerySentí sus dedos presionando con fuerza mi cuello. Una rabia tan intensa me recorrió el cuerpo que, sin pensarlo, lo empujé con todas mis fuerzas, alejándolo de mí.—¡MIRA, MALDITO ENFERMO! —grité con la voz temblando de dolor—. ¡SI LLEGAS A TOCARLE UN SOLO CABELLO A MI NANA O A MI MADRE, TE JURO QUE TE MATO!Corrí como si el corazón me fuera a explotar. Me lancé hacia la camioneta donde estaban ellas. Al llegar, mis manos temblorosas intentaron quitar las bolsas de sus cabezas.—¿¡Mamá, eres tú!? —susurré, llorando, con la voz hecha trizas.Pero antes de poder tocarlas, dos hombres de Mathew me sujetaron con fuerza y me arrastraron hacia atrás.—Señorita, no puede acercarse a la camioneta —dijo uno con tono frío—. Por favor… no nos obligue a matarlas.Mis puños se cerraron con rabia. Las lágrimas me corrían sin freno por las mejillas. Mis piernas temblaban, pero me obligué a mantenerme de pie. Volteé despacio, quedando cara a cara con Mathew. Sus ojos, llenos de locur
Leer más