La tarde antes de salir de la oficina para Anne fue muy estresante, cuando Alexander paso por ella a la oficina ella se encontraba hecha un manojo de ansiedad y demás cosas; la mirada de Alexander era de preocupación, sabía que la enfermedad de Anne podía activarse por estrés, solo quería que descansara un poco. Anne no quiso comer para preocupación de él, su rostro se veía desmejorado, la noche fue cayendo y con ello un silencio inquietante para él. La mansión dormía bajo una luna encapotada, cubierta por nubes densas como presagios. El viento soplaba con insistencia entre las ventanas altas y antiguas, haciendo crujir las maderas, como si la casa misma quisiera hablar. Afuera, los árboles se mecían con fuerza, y en el interior, todo estaba en penumbras, silencioso.Anne dormitaba en la cama de la habitación principal, envuelta entre sábanas de lino. A su lado, Alexander dormía profundamente, con el brazo estirado sobre su espalda. Pero su cuerpo comenzó a agitarse: los párpados te
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