C221-DIME QUE TE QUEDAS.La fiesta se alargó. La música, el fuego y las copas no paraban y para entonces, Ashley se había ganado a los dragones. Bebía con ellos, reía fuerte, los escuchaba sin miedo y se burlaba como si hubiera nacido allí.Y Drakos la observaba con una sonrisa que ya no se molestaba en ocultar. Se sentía ligero, feliz, incluso olvidó que era el rey y que ella era su esclava.La siguió con la mirada como si le costara dejarla ir y cada gesto, cada risa, cada movimiento suyo lo tenía al borde.—Ey, basta ya de licor, rey enamorado —dijo Therion, apareciendo a su lado con una sonrisa burlona, le quitó la copa de las manos—. Vas a caerte del trono si sigues así. Vamos, levántate… necesitas dormir.Drakos lo miró con los ojos entrecerrados, ya mareado.—No estoy borracho... solo... relajado. Ashley es... única... ¿ya te dije eso?—Ya... cinco veces —se burló su amigo, riéndose—. Vamos, tu loba va a ayudarte.―Me gusta eso ―dijo Drakos riéndose como un tonto.―¿Te gusta qué

C223-NOTICIAS.Drakos sostenía un cuenco humeante entre las manos. El olor era fuerte: raíz de dragón molida, savia negra y caldo de hueso rojo. La sopa tradicional para la resaca. Asquerosa, pero efectiva.Se la llevó a la boca con desgano y el ardor en la garganta le recordó que estaba vivo.Se había despertado antes del amanecer y no quiso despertarla. Ashley dormía tranquila, envuelta en las pieles, y él solo la miró un rato antes de salir de la habitación.Recordaba haberse quedado dormido de golpe.El licor había hecho estragos, pero justo antes… justo antes de perder la consciencia, la había oído."Sí."Y esa palabra le había quedado dando vueltas en la cabeza desde entonces.Bajó la vista al cuenco y sonrió un poco y no era solo eso. Ella se había ganado el respeto de su clan y todo en una sola noche. Y eso... eso le daba esperanza. De que tal vez había una oportunidad para ellos, para algo real.Pero la puerta se abrió de golpe.—¿Cómo amaneció el rey borracho, enamorado y ba

C225- ¿CUÁL ES LA SALIDA?Ashley no era tonta. Sabía que Vexys no daba un paso sin motivo. Por eso, en lugar de rechazarla de inmediato, decidió seguirle el juego, ver hasta dónde llegaba. No porque confiara en ella, sino porque algo en su tono… no sonaba como siempre.—Habla.Vexys sonrió como si eso fuera justo lo que esperaba.—Hago esto porque… Drakos nunca te va a liberar. No importa lo que diga o te haga sentir. Nunca lo hará. Pero yo sí puedo ayudarte.Ashley frunció el ceño y su corazón dio un salto, pero su cara seguía seria.—¿Y por qué harías eso?—Porque mientras tú estás acá ... tu padre perece.El golpe fue directo y Ashley no se lo esperaba.—¿Qué?La dragona se enderezó, más seria.—Puede que no lo escuches, loba. Pero los rumores van y vienen… y según se dice, tu padre está muy enfermo, tanto que… a punto de irse de este mundo.Ella sintió que algo se le hundía en el pecho. Quiso negar, pero no lo hizo, su mirada se perdió por un segundo. Su padre no era perfecto. Hab