Capítulo: 3

                                            “Mentiras y consecuencias”

Brenda

No había pegado ni un sueño en toda la noche y se preguntarán por qué. Estuve muy inspirada y muy creativa ya que la emoción que tenía era única, estuve pensándolo mucho mejor y la idea de entrar en la audición y presentar mi canción era una oportunidad. Se trataba sobre una participación en un teatro, en donde sólo los mejores según los profesores elegirían para representar al studio. Debemos escribir una canción y cantarla, la mejor canción será representada en el teatro, y para eso tendríamos nada más que una semana de tiempo para comenzar a escribir.

Mis amigas me animaron mucho para audicionar, es importante la participación de Lodyssion en el teatro, ya que el studio que mejor participe tendrá la oportunidad de viajar a España-Madrid, en donde se dará el mejor show del verano.

Ya no me gustaba mentirle a mi papá para salir todos los días, diciéndole que me voy a trabajar en el gráfico de diseños, pero tampoco quiero dejar de asistir y sé que si él se llegara a enterar de todo cambiaríamos de país.

Sí, mi papá está absolutamente negado a qué siga el camino qué siguió mi madre.

Pero al ver las fotos de antes cuando mi madre estaba aún conmigo, me llegaron muchas ideas para poder terminar mi canción, y estaba preparada, sólo faltaba la melodía y aún no había empezado para componerlo.

—Hola princesa, por fin te encuentro. Creo que me estás evitando ¿o me equivoco? — el mejor novio del año apareció.

—Hola, creo que no te equivocas porque para mí sería mucho mejor si no nos encontráramos — puse los ojos en blanco.

—¿Así tratas a tu novio? — esta vez respondió otra voz y si no me equivocaba era Alex, amigo de éste idiota —, pero que gran cariño tienes hacia mi amigo, Bren.

Oh, cariño no es lo que le quiero dar, sino unos buenos golpecitos en su estúpida y hueca cabeza para que se olvide de todo este jodido asunto de fingir.

—Créeme qué no es lo que quisiera darle a tu amiguito, se merece algo mucho mejor — respondí con una sonrisa forzada.

Es decir querido Alex, se merece lo peor tu querido amigo.

—Cómo sea, sé que se entenderán más adelante, pero no vine a hablar aquí de su bonita relación falsa — dijo sonriendo pícaramente.

Me empezaba a molestar su comentario, jamás podría ir algo bien con Hansel, una amistad no lo creo y una relación de verdad lo dudo mucho porque no confío para nada en él y mucho menos en cómo me forzó a aceptar su estúpido juego.

Jamás podría imaginarme tener algo de verdad con él, ni quiero imaginarlo.

—En fin vine a decirles o más bien invitarlos ésta tarde al karaoke, estaremos casi la mayoría del studio ahí y que mejor si la pareja del año va — comenzó a reír. Hansel y yo lo fulminamos con la mirada —, bien está bien, fue tan sólo una broma, pero háganme un favor y vayan porque estará súper cool y así amigo mío cantamos la nueva canción — dicho todo eso le guiñó un ojo a Hansel y se fue.

—¿Karaoke? — pregunté sin fijar mi vista hacia donde iba Alex.

—Suena bien ¿o no princesa? qué dices si vamos. Te va a gustar mucho ese lugar, es uno de mis favoritos— alegó.

—Así que tienes un lugar favorito como ese — enarque una ceja  mirándolo fijamente —. Creí que te gustaba estar rodeado de bares y otras cosas no tan agradables. Supuse que tienes otros estilos.

—Pues supones muy mal, como siempre — rodó sus ojos — ¿Por qué siempre lo haces?

—¿Hacer que?                                                                   

—Suponer cosas muy malas de mí — aclaró.

—Digamos que no tienes la mejor reputación del mundo — hice un gesto dramático —, y en conclusión yo no te veo cómo las otras chicas te ven a ti.

— ¿Y cómo me ven los demás?

—Pues cómo un rey que siempre tiene todo lo que quiere— respondí sin dudar.

—¿Y tú cómo me vez? — prosiguió con su pregunta.

—Qué más da como yo te veo, aunque si en realidad quieres saberlo — hice una pausa —, veo a alguien qué no le importa la otra persona, con tal de tener lo que desea.

Fuertes declaraciones señores y señoras ¿pero que esperaba?

Me miró fijamente a los ojos, su rostro cambio a un poco más serio.

—Estás equivocada, a mi me encanta la música y cuando estoy cantando el mundo pinta de otro color — habló con una media curva en sus labios —, la música es algo en donde te deja ser libre y expresarte como eres.

Está bien, eso sinceramente no me lo esperaba ¿pero podré creer eso en verdad? Aún no lo vi cantar ni tocar nada, creí que solo se paseaba por los pasillos y que buscaba alguna chica a la vista. Nunca noté interés.

—Es que no lo demuestras Grozzi, jamás te vi tocar un instrumento y no sé si sepas que es. Jamás te escuché cantar, la impresión lo dejas tú solito.

—Yo cantó cuando quiero — murmuró fijando su vista en otro punto —, que dices si vamos a ese karaoke, y te demuestro todo lo contrario a lo que esas palabras que salen de tu boca se las borre ésta tarde allí, dejándote impresionada — me miró con una sonrisa que llegaban a sus ojos.

—¿Crees impresionarme?¿a mí? ni de chiste pero estaría bien si confirmo eso de ti — añadí con otra sonrisa pero de diversión y reto en ella.

Ya quería ver esto, Grozzi con un micrófono.

—Pues te espero al terminar todo aquí princesa, sólo espero no hacer cambiar esos sentimientos al escucharme cantar — me guiñó el ojo y sin poder responderle más ya había dado la vuelta para perderse entre los demás.

Pues creo que me prepararé muy bien para ésta tarde, y así presenciar todo lo que estaría por pasar ante mis ojos. Creo que será divertido.

¿Qué podemos esperar o no?

Tal vez y por fin me suceda algo bueno.

Luego de terminar todas las clases, me preparé para irme con mis amigas a donde Alex nos invitó, pero las dos se fueron sin mí y lastimosamente no conocía el lugar, así que tuve que ir con Hansel, quién no paró de hablar durante todo el camino sobre lo grandioso que es a donde iríamos.

Llegamos al lugar, el famoso KaraokeFest era enorme con muchas luces de  colores y un escenario espectacular. Había muchas personas lo cual se notaba que la pasaban genial. Mientras que yo apreciaba todo a mi alrededor Hansel me dejó para ir junto a sus amigos. No podía creer que no había visitado antes este sitio.

Comencé a buscar a mis amigas porque no quería estar sola y fue entonces cuando choqué con alguien.

Diablos.

Últimamente me tropiezo con todo el mundo.

—Ohh perdón lo siento — me respondió un chico alto, ojos claros azulados muy hipnotizantes —. No fue mi intención, estaba muy hundido en mis pensamientos que no te pude ver.

—Tranquilo no te preocupes, éstas cosas suelen pasar; yo choco siempre con todo el mundo así que para mí eso ya es normal — le respondí amablemente.

No podía negar que era muy atractivo.

—Eres graciosa — sonríe mostrando su perfecta dentadura —, pues bien por mí, no todos los días choco con una chica hermosa — está bien, no me sonroja su comentario ¿o sí? —. Me llamo Oliver Sharman y ¿tú?

—Brenda Hewitt — le estreché mi mano para saludarlo.

—Pues que lindo nombre tienes, encantado de conocerte — me regaló una perfecta sonrisa.

—Gracias — me limité a decir y a no sonrojarme como una tonta que se deslumbra por lo guapo que es este hombre.

Rayos.

—¿Vas a cantar o sólo vienes a mirar? — me miró fijamente como si mi respuesta era lo más importante.

—De hecho es la primera vez que vengo aquí, me invitaron así que  aquí estoy pero ya debo irme, mis amigas me están esperando— me puse nerviosa.

En realidad no me estarán buscando pero que bonita excusa Brenda ,no todos los días chocas con un chico guapo y sexy.

Pero la manera en que me habla y me mira me hace sentir rara, nunca nadie me había hablado así por Dios.

—Ah claro ya te dejo entonces, mis amigos de seguro también — que coincidencia —, espero volver a verte por acá — me miró dulcemente.

Hermosa mirada, por cierto.

—Claro, me ha fascinado el lugar — le sonreí para luego decirle adiós y salir a buscar a mis amigas.

Huyendo de los chicos, como siempre y siendo una tonta al 100%, si mis amigas saben porque no había llegado antes me harían millones de preguntas como el FBI y era lo que menos quería, además ya había que olvidarlo solamente fue un momento, un simple choque con un jodido chico lindo.

Fijé mi vista y me encontré con mis amigas.

—Por fin apareciste ¿te rapto un aliens o algo así? te estas por perder lo mejor, los chicos van a comenzar a tocar enseguida —Leah pronunció gritando y casi me deja sorda.

No me raptó un aliens, básicamente fue un encantador y hermoso chico.

Ay dios, basta. Tengo que calmar mis estúpidas hormonas y mejor olvidarme del asunto.

Cuando estuve a punto de responderle alguien me estiró del brazo.

—Princesa, te estaba buscando — ¿por qué siempre me dice así? odio cuando lo hace —, espero que aprecies la vista desde aquí porque éste bombón — se señaló a sí mismo —, estará cantando y quiero que me escuches bien y cambies esa opinión estúpida que tienes contra mí — sonrió juguetón.

—Pues impresióname Grozzi, haz que valga la pena — le sonreí, falsamente.

—No te emociones tanto, porque no quiero que te vuelvas mi super fan después de esto.

—Créeme que no me emociono fácilmente, al menos viniendo todo de ti, no te creas tan importante por favor. Creo que alguien debería bajarte de esa nube.

—Conmigo linda todo puede pasar, así que sólo concéntrate y escúchame —antes de darse la vuelta depositó un beso en mi mejilla.

Enserio éste chico me saca lo peor. No sé hasta cuanto tiempo tendría qué soportarlo, me molesta todo de él. Lo único que quisiera es nunca haber mentido a mí padre y así nunca hubiera aceptado ésta estúpida farsa.

El escenario se encendió de luces y ahí estaba él junto a sus amigos. Noté en su rostro que estaba muy tranquilo y sereno, fijó su vista hacia mí y me miró de una manera extraña, luego me sonrió queriendo tratar de decirme algo como "observa y sólo escúchame princesa" y seguido comenzaron a tocar.

Se escucharon muy fuertes todos los aplausos, mis amigas gritaban de la emoción porque para que negar; sí estuvieron demasiado bien, es más, hasta la letra de la canción era hermosa.

Pero es obvio que no se lo haré saber a Grozzi.

Sentí unas manos en mi cintura, y me di la vuelta lo más rápido posible para saber quién puso en mis preciadas caderas sus terribles manos.

—Oye tranquila, no te voy a asaltar princesa — ya debí imaginármelo.

—Casi mueres por éstas manos Grozzi.

—Al menos que asalte tu corazoncito — me guiñó el ojo.

Tenía un problema de tic éste idiota.

—Hay no exageres, sólo dime qué te pareció, no puedes decirme que lo hice pésimo. Todo el mundo sabe lo genial que estuvimos.

—Corrección, no soy todo el mundo pero debo admitir que sí cantas bien y que sabes que es un instrumento — especifiqué.

—Así que, ya puedes dejar de pensar lo peor de mí.

—Con que me demuestres que cantas y tocas no significa que ya confío y se demasiado de ti — le sonreí enarcando una ceja —, aun no me olvido que por tu culpa estoy envuelta en otra mentira más.

—Ya lo sé, y no me importa si cambias de opinión, solo quería demostrarte lo contrario — alegó —, espero escucharte también — se acercó más a mí —, mi novia debería dedicarme una canción — susurro casi sólo para que él y yo escucháramos.

Eso jamás de los jamases, ni en tus sueños Hansel, dedicarte una canción a ti eso claramente no pasará.

Sin poder volver a responderle de nuevo, la mismísima rubia supernova de las se acercó a nosotros.

—Hola guapo, estuviste muy bien — detuvo luego su mirada en mí — veo que no sabes felicitar a la gente. Eres la novia y ni siquiera le das un beso, lo siento pero que floja eres amiga — la fulmine con la mirada

Entonces lo hice a propósito.

Me acerqué todo lo que pude junto a Hansel y lo rodee con mis brazos.

—Primero, no soy tu amiga — le dediqué una sonrisa falsa a la rubia —, y segundo eso a ti no te incumbe, no somos de demostrar mucho afecto en público, sólo cuando estamos a solas — le guiñé un ojo —. ¿Verdad lindo? — miré a Hansel.

Estaba sorprendido ante mi acción, pero sonreía con malicia.

—Así es preciosa, tú lo has dicho.

Volví a fijar mi vista sobre Helen, y juro que estaba por explotar, estaba echando humos la muy desgraciada. Sin más que decir Hansel agarró mi mano y me indicó para salir de ahí.

Tendría que irme acostumbrando con éstas clases de escenas, era eso o terminar delatada. No tengo más que otra opción, así que tendría que poner todo mi esfuerzo en ésta gran farsa.

No sé como hacen esas personas para que la mentira les dure, actúan natural como si mentir fuera lo más normal. Odio hacer esto, mi vida está llena de situaciones en las que solo existe mentiras y engaños, me siento mal tener que mentir a mi padre, y para sumar más desastre a mi vida; el tener que fingir amor con el chico más egoísta.

Ya ni sé cómo llegué hasta este punto, pero sé que de las mentiras no siempre nace algo bueno.

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