Príncipe/princesa

Diez meses después del nacimiento de mi amada hija, las cosas en mi vida cambiaron; un giro de 180° no termina de describir qué tan abrupto y fuerte fue el cambio. No tuve una vida fácil, por no decir una vida de mierda; ser una niña indefensa y hermana de alguien con tan pocas neuronas como el bastardo con el que comparto sangre ha sido un castigo. Ese castigo fue como definí mi existencia desde que ese hermoso y completo desconocido apareció en mi vida como un maldito huracán, arrasando con todo a su paso, pero dejando algo bueno en medio de ese tortuoso camino. No sabía quién era él ni a qué se dedicaba, aparte de su negocio legal. ¿Qué hice? Me involucré completamente con él, creyendo que posiblemente fuera una señal de Dios para darme una segunda oportunidad en el amor, algo para lo que no me consideraba apta. Antes de todo eso, tenía que esquivar sus constantes llamadas, mensajes y visitas sorpresa a mi trabajo; insistía en hablar conmigo. Un día, sin tener otra opción, accedí; salvó mi vida cuando pendía de un hilo. Una taza de té no me dañaría. ¿La sorpresa? Me quería a mí, a mi hija. Una venganza me llevó a ser su esposa y la próxima jefa de su mafia.

El reino de Eryndor está al borde de la ruina. La profecía lo dejó claro: el trono está maldito y solo una reina de sangre noble podrá salvarlo… o condenarlo para siempre. Lyria de Valendor ha sido criada para el sacrificio. Como la última descendiente de su linaje, su destino es claro: casarse con el príncipe maldito, el hombre cuyo nombre susurran con terror en los pasillos del castillo. Nadie ha visto su rostro en años. Dicen que su alma está encadenada a la oscuridad, que la maldición que corre por sus venas consume todo lo que toca. Pero Lyria no es una princesa dispuesta a seguir las reglas. Con un reino al borde del colapso y un enemigo oculto moviendo los hilos en las sombras, su única opción es entrar en la boca del lobo… y destruirlo desde dentro. Lo que no esperaba era que su enemigo más temido pudiera mirarla con el mismo anhelo con el que la luna mira al océano. Ni que, en su batalla por deshacerse de él, descubriera verdades que podrían hacerla dudar de todo lo que creía saber. Porque, a veces, los monstruos no son quienes llevan la corona, y el amor puede ser la maldición más letal de todas.

El gran salón estaba decorado con luces de hadas parpadeantes y hojas de otoño, un animado telón de fondo para lo que muchos creían ser la boda perfecta. Priscila observaba a su hermana gemela, Lucia, preparándose para caminar hacia el altar. La música encantadora llenaba el aire, y cuando sus miradas se cruzaron, Lucia le guiñó un ojo, su emoción era palpable. Poco sabían las gemelas que, acechando en las sombras, se encontraba Joseph, un hombre lobo muy apuesto pero carismático y peligroso, quien pronto sumiría sus vidas en el caos. Antes de que Lucia caminara hacia el altar la música se detuvo, ella le hizo un gesto su hermana que necesitaba hablar a solas y la llamó con la mano. Pero era demasiado tarde, su hermana la había dejado a solas con su futuro esposo. Joseph, un hombre galante y enamorado sin prestar atención a las tradiciones caminó hacia mi, vestida de novia, y me pidió conversar ambos a solas. Minutos después Joseph salió anunciando que la novia se encontraba indispuesta y había salido a tomar aire fresco pero la ceremonia se celebraría sin demoras antes de caer la medianoche. A medida que los votos intercambiados entre Priscila y Joseph flotaban en el aire, una abrumadora sensación de miedo descendió sobre Priscila, quien ahora fingía ser su hermana gemela, Lucía. Algo en la mirada de Joseph parecía depredadora, cuando él fijó sus ojos en ella. La noche de bodas se convirtió en horror cuando la luna ascendía en el cielo. A medida que Priscila, sin darse cuenta, ocupa el lugar de su hermana Lucía, lentamente descubre la siniestra verdad sobre Joseph, quien es un asesino en serie de gemelas. Ahora que Priscila es la nueva novia, ella se convierte en la próxima en su sangrienta lista de venganza.

La curiosidad mató al gato, Srta. Adams.” Mi cuerpo se tensa. Me doy la vuelta lentamente para ver al Sr. Parker de pie frente a mí, con las manos en los bolsillos de su pantalón. Me muerdo el labio. Pensé que estaría enojado, pero cuando lo miro, su rostro está impasible. Entonces comienza a caminar hacia mí, y yo retrocedo. Esto continúa hasta que mi espalda toca la puerta. Luego pone una mano en mi costado, inclinándose hacia adelante, cerca de mí. “¿Cuál es la regla número tres, Srta. Adams ?” Su rostro está extremadamente cerca del mío y me déjà sin aliento. No puedo responder a su pregunta, demasiado concentrada en la distancia que nos separa. “Te hice una pregunta, Srta. Adams,” repite. “Que hay zonas prohibidas en la casa a las que no debo ir.” “Parece que recuerdas las reglas. Esta habitación es una de esas zonas prohibidas. Así que la próxima vez, piensa antes de meterte en problemas.” Fijo mis ojos en los suyos. Estoy perdida en esos ojos color mar. Ningún otro hombre me ha desconcertado tanto como el Sr. Parker. Estoy nerviosa en su presencia. No sé qué es, pero este sentimiento es diferente. Un sentimiento que nunca he sentido por nadie. “¿Entendido ?” dice él de nuevo. Asiento con la cabeza. “Sí, Sr. Parker.” Liam Parker, millonario de 25 años. Arrogante, guapo, implacable, lo único que le importa es su hijo y su trabajo. Bella Adams, joven mujer sencilla y extrovertida de 24 años, que vive con su niñera en un orfanato. ¿Qué sucederá cuando Bella se convierta en la niñera del hijo de Liam ? Descúbrelo en la historia…

Naiara, una princesa que mandó al carajo la realeza cuando su padre murió para vivir su vida lejos del protocolo, ahora se dedica a organizar bodas en una isla tropical. Su nuevo desafío: planear la boda de su mejor amiga junto a Aziel, el padrino y hermano del novio.Aziel es un fotógrafo famoso, guapo y con un problema que lo persigue: cuando se pone nervioso, no se le levanta. Y claro, eso le ha costado que todas las mujeres con las que ha estado lo terminen dejando por otros. Pero Naiara no es como las demás, con su carácter tozudo y su forma directa de hablar, le despierta algo que ninguna otra ha logrado.Entre discusiones, momentos incómodos y una atracción que crece sin permiso, Aziel se enfrenta a su mayor reto: controlar los nervios y demostrarle a Naiara que, por primera vez, no quiere que lo dejen.

Me llamo Azalea Izzy Haro Benavides, hija del rey Falcón y la reina Azucena. Princesa del reino de León. Última en la fila, octava de ocho. O, como solían decir mis adoradas hermanas: la abeja bastarda. Ellas son Daisy, Maisy, Suzie, Hazel, Eliza, Lizzie y Patsy. Siete nombres dulces, casi idénticos, como si mis padres hubieran querido fabricar una colmena perfecta... hasta que nací yo, la que rompió el molde. La que salió con ojos grises como las tormentas y pelo dorado como el sol. Una mancha dorada en su enjambre oscuro. Desde que tengo memoria, me han empujado al margen: a la cocina, a los establos, a los pasillos traseros del castillo donde la realeza no se ensucia las manos. Ahí aprendí a freír pan sin quemarlo, a coser heridas sin llorar, y a estudiar las estrellas mientras ellas se pintaban las uñas con oro líquido. Mientras ellas se creían reinas por derecho, yo aprendía a sobrevivir. Por eso el día del baile con los príncipes de la Alameda –el evento que podría cambiar nuestro destino– rasgaron mi vestido a escondidas, lo tiñeron de tinta y dejaron mi corona flotando en una cubeta con excremento de caballo. Pero no lloré. Roderick. El médico. El de mirada seria y manos limpias de sangre. El que no bailaba con muñecas de porcelana. El una amenaza. Yo una abeja reina.

Hayley vivió tranquila rodeada de sus mejores amigos y familia por toda su vida, con una madre que siempre intenta venderla al mejor postor mientras que ella trabaja para mantener a su familia. Todo da un giro inesperado cuando llega un visitante desde Alemania para decirle a su madre que Hayley es la prometida del próximo Rey. Sin esperanza alguna o derecho de replicar, su madre la entrega sin remordimiento alguno. Cuando Hayley llegue a Alemania, se encontrará con el peor ser que haya conocido, un príncipe prepotente, lleno de odio hacia la humanidad que solo quiere convertirse en Rey para tener control y poder sobre los demás. Una larga convivencia, un matrimonio arreglado, dos personas que no se aman y un trono que está en juego. ¿Podrá el Rey sin alma amar a la dulce y fuerte Hayley?

Cuando un experimento descontrolado rasga el tejido de la realidad, tres amigos—Alex, Amira y Luis—se ven arrastrados a una misión desesperada para salvar su planeta de la aniquilación. Pero las apuestas son más altas de lo que jamás imaginaron. Mientras el trío navega por dimensiones que colapsan, sus emociones enredadas amenazan con romper su unidad: el amor no correspondido de Amira por Alex crea una peligrosa brecha, mientras que la silenciosa atracción de Luis por Amira alimenta un resentimiento oculto. Cuando Amira desaparece en el misterioso vacío, Alex y Luis deben arriesgarlo todo para encontrarla. Pero cuanto más se adentran en los mundos fragmentados más allá de la grieta, más se dan cuenta de que esto no se trata solo de salvar a Amira, sino de desentrañar la verdad detrás de una fuerza que podría destruirlos a todos. Con el tiempo agotándose y los sacrificios acumulándose, Alex y Luis deben enfrentarse a una pregunta imposible: ¿qué están dispuestos a perder para salvar a quienes aman? En 'El Paradoja del Abismo', el amor y la lealtad son puestos a prueba en un escenario de realidades colapsando, dejando a los lectores al borde de sus asientos y ansiosos por el próximo capítulo.

Sofia Stagnaro es una mujer joven, con un secreto y una extraña curiosidad por el sexo; pero su timidez y falta de práctica sexual, la retrae para llevar a cabo sus fantasías, por lo que solo se limita a leer libros eróticos. Ian Russel es un joven policía federal; sin secretos, pero muy ducho en el sexo, sabe cómo complacer a una mujer tanto dentro como fuera de la cama, sin embargo, nunca deja de ser solo sexo. Ella es tímida, no habla mucho y él está vigilado por Lina, que le advirtió que no se le acercara. Ambos saben que Ian puede llegar a lastimarla «todos son conscientes de eso», pero no es tan fácil alejarse; Sofi tiene algo que hace que él invente cualquier excusa para volver a verla. Por lo tanto, sin más remedio, llegan a un acuerdo; Sofi le pide que le enseñe cómo ser buena en el sexo. Ian le pide que le enseñe cómo ser bueno en el amor. Ambos afrontarán sus más básicos miedos y aprenderán del otro. Solo deben acoplarse a esta osada aventura.

Avery Tate foi forçada a se casar com um figurão por sua madrasta, graças à falência de seu pai. Mas tinha um detalhe, esse figurão — Elliot Foster — estava em coma. Aos olhos do público, era apenas uma questão de tempo até que ela fosse considerada viúva e expulsa da família.Mas tudo mudou quando Elliot inesperadamente acordou de seu coma.Furioso com a situação de seu casamento, ele soltou sua raiva em Avery e ameaçou matar seus bebês se eles tivessem algum. "Eu vou matar eles com minhas próprias mãos!" ele gritou.Quatro anos se passaram quando Avery mais uma vez voltou para sua terra natal com seus gêmeos - um menino e uma menina.Ao apontar para o rosto de Elliot na tela da TV, ela lembrou aos bebês: “Fiquem longe desse homem, ele jurou que ia matar vocês dois”. Naquela noite, o computador de Elliot foi hackeado e ele foi desafiado - por um dos gêmeos - a cumprir sua promessa. “Vem me pegar, seu cuzão!”