Caçador

Eva es una joven estudiante talentosa y apasionada, se ve envuelta en una vorágine de terror cuando un hombre obsesionado con ella, Nick, irrumpe en su vida. Con cada movimiento calculado, Nick teje una red de control en torno a Eva, alimentando su dolor y sumiéndola cada vez más en la desesperación. Las miradas intensas de Nick parecían atravesar el alma de Eva, convirtiéndola en prisionera de sus propios miedos. Cada paso que daba Eva hacia la libertad, Nick la arrastraba de vuelta hacia la oscuridad, empujándola al borde de la locura. Entre sombras y susurros, Eva lucha por mantener su cordura y escapar del abismo en el que ha caído. Sin embargo, la sombra de Nick se cierne amenazante sobre ella, convirtiéndose en su peor pesadilla. ¿Podrá Eva encontrar la fuerza para romper las cadenas de la obsesión o sucumbirá para siempre al oscuro poder de Nick?

Él un chico frio de mirada oscura enfadado con el mundo. Ella una chica carismática y despreocupada. Él un ladrón sin nada que perder. Ella una chica encantadora con ganas de vivir. Él es como un diablo aterrador al que todos temen. Ella es como un ángel caído del cielo a la que todos adoran. ¿Qué pasara cuando sus mundos se encuentren? ¿Ella será su salvación, o él la convertirá en lo que ella más temía?

Y aquí estaba en medio de la nada, sola, humillada y traicionada. Me enteré de su engaño a una semana de casarme con quien pensé era el gran amor de mi vida. Eso del amor es mentira, el amor verdadero no existe, nunca hay un feliz para siempre. Nadie es fiel en este mundo lleno de gente traidora. Si, si, habla una mujer despechada, desilusionada, abandonada y dejada. Y no estaba en la nada, estaba en mi habitación, pero ya saben lo dramática que una puede ser. Me llamo Isabella Lagunes y esta es mi historia. ************************* Luego de enterarse del engaño de su prometido a una semana de la boda, decide irse un tiempo a New York. En una fiesta de máscaras conoce a un hombre alto, musculoso y con unos impresionantes ojos azul celeste. Comienza a trabajar con Fernando Altamirano, un empresario y diseñador famoso que por cuestiones de salud deja a cargo a su hijo mayor, Christian Altamirano. Un hombre con un pasado complicado en el amor. ************* Secretos, mentiras, una traición, complicidad entre amigos, pero, sobre todo, una segunda oportunidad para el amor.

Hoy era el día, hoy cumplía mis 18 años de edad. Para todo el mundo eso seria la mayor emoción que podría tener pero para mi era todo lo contrario. Mi mayor sueño era nunca llegar a cumplir mis 18 años por que mi vida se iría por el caño como muchos dicen. Desde mis cinco años tuve enteramente prohibido acercarme a cualquier hombre que intentara acercarse a mi por que no podía amar a otro que no sea mi prometido. Si como escucharon, mis padres al cumplir los cinco años de edad me comprometieron con un heredero de Italia, solo por beneficio propio de ellos mismos y la que debía de hacer el mayor sacrificio era yo. ¿Estaba lista para hacerlo? Sin dudas mi respuesta seria un No.

Cuando a Gabriel le asignaron el trabajo de cuidar a Luna, en secreto, imaginó que sería solo un trabajo más. Pero antes de siquiera darse cuenta, se encontró interesado, demasiado interesado en ella. Ya no la veía como una clienta sino como la mujer de su vida. Luna se encontró rodeada de atenciones constantes por parte de Gabriel, sintiendo como su corazón se ablandaba y caía redondito por él. Descubrir que ella era su clienta fue devastador, ¿podría confiar en que los sentimientos de Gabriel eran auténticos, o la había enamorado para que resultara más sencilla de cuidar?

"Todo se volvía confuso, no podía confiar en nadie, y él era el único que venía a derribar si mi permiso el muro que había creado. Él podía explicármelo todo, sobre aquello que desconocía, todo sobre lo irreal. Porque él tampoco era un... humano. Tardé en asimilar eso. En gran parte no entendí rápidamente lo que quiso explicar. —¿Y tú qué eres? —Inquirí, al decir que "éramos hijos de los hombres" él y yo no nos incluíamos. Tardó en darme una respuesta. —No me lo creerías. —¿Después de todo lo que ha pasado? ¿En serio? Vamos —Insistí—. No puede ser tan malo. ¿Qué podría ser tan malo como para que no quisiera contármelo? Respiró profundamente, como si debatiera con su yo interno. —Nos hacemos llamar y nos conocieron como los Vigilantes —Respondió sin verme. De todos modos, aún sabiéndolo, escucharlo... mi corazón cayó a tres metros bajo el suelo. Las atrocidades que habían hecho ellos, todo lo que había leído sobre ellos, ellos eran... Me quedé en silencio, la habitación oscura ocultó el miedo irracional que sentía, él no iba a hacerme daño ¿o sí? —Eres un... —No podía pronunciarlo, las palabras no salían de mí boca. —Un ángel caído —terminó por mí."

Emma, además de ser la hija de uno de los más importantes generales del ejército de Lostland, es una de las líderes de la resistencia que busca derrocar al monarca. En sus anhelos de hacer del reino de Lostland un sitio justo y bueno para vivir, su vida da un giro drástico, en el que se convierte la «elegida» del príncipe, para convertirse en su futura esposa. Ella se adentra en el peor lugar del reino: el palacio, un lugar sangriento en el que se viven las peores traiciones. ¿Podrá Emma rescatar al reino de Lostland de su más grande caída? ¿Podrá derrotar ese «mundo de Hombres»? —Siento que somos menospreciadas por el simple hecho de ser mujeres—

Erin Goodman ha sido testigo de muchas cosas a lo largo de su vida, pero luego de haber escapado de la muerte y de su ex poso abusivo, encuentra la ayuda en quien menos lo esperaba: el detective de incendios Aaron Jones, con quien tenía un pasado caótico y lleno de deseo. Aaron, un ex militar retirado y cliente frecuente en un club de BDSM en la ciudad, promete a Erin que la protegerá, y luego de una inevitable noche en la que ambos recuerdan el pasado, Erin intentará proteger su corazón, pero la llama de la pasión arde con fuerza, convirtiéndolo pronto en un torbellino candente de emociones, pasión y sentimientos, que podrían consumirlos a ambos.

Cuando Jorge Echeverría y yo cumplimos cinco años casados, la verdad finalmente salió a la luz: todos se enteraron de la muchacha que él mantenía escondida en aquel hotel. Para evitar que la señalaran como la «amante», Jorge apareció con los documentos de divorcio en la mano, diciéndome: —El profesor Quiroz fue mi mentor. Y, antes de fallecer me hizo prometerle que cuidaría de Emilia. Ahora que todo esto se ha hecho público… tengo que responder por ella. A lo largo de todo nuestro matrimonio, Emilia Quiroz siempre había ocupado el primer lugar para Jorge. Anteriormente, cuando me vi obligada a enfrentar esta misma situación, me desmoroné por completo, aferrándome a ese matrimonio entre lágrimas y reclamos, resistiéndome a terminar nuestro matrimonio. Tras eso, caí en una profunda depresión, pero Jorge, influenciado por Emilia quien comentó con ligereza: «Mariana parece estar perfectamente bien», terminó convencido de que yo fingía para manipularlo. Incluso, creyó que intentaba tenderle una trampa para acusarlo de infidelidad, por lo que procedió con el divorcio por la vía judicial. Fue entonces cuando comprendí una dolorosa verdad: jamás podría competir contra una deuda de gratitud. La desesperación me llevó a tomar la peor decisión: me quité la vida. Pero, esta vez, cuando desperté en esta segunda oportunidad: firmé los papeles sin pensarlo dos veces.

Mientras busco las palabras para describir mi extraña vida, puedo decir que fui llevada por el inexplicable deseó de saber quien era esa persona qué quería hacerme dañó, entender por qué o como es que sucede la obsesión, esa obsesión qué te provoca hacer cosas locas con tal de ver o estar cerca de esa persona. Mientras buscaba el modo de estar lejos de el y segura, el siempre me encontraba, y un día me canse de huir, finalmente pregunte,- ¿ Que es lo que quieres de mi? Su respuesta me dejo sin aliento, el contesto - Todo.