Abigail es una mujer que después de su traumático divorcio intenta volver al mundo laboral y terminara trabajando con Lucían quien es varios años menor que ella, este la hará volver a tener ganas de volver a enamorarse, pero la diferencia de edad y el hecho de que él sea una persona muy conocida hará que sea difícil que ambos esten juntos
Leer másPuse toda la ropa sobre la cama, y la mire, era tan poca y toda era tan anticuada, me hacía parecer mucho mayor de lo que era, tome un suéter y lo vi de manera detenida, estaba desgastado, y las mangas comenzaban a deshilacharse, ¿cómo pude vivir tanto tiempo así, como es que permití que me trataran de esa manera por tanto tiempo?
Tire el suéter al piso, y después el resto de la ropa, me sentía asqueada de la persona que fui, me senté sobre la cama, y vi el sobre que estaba encima de la mesita de noche.
Mañana era mi primer día de trabajo y no tenía nada que ponerme, tendría que comprar ropa con mi primer sueldo. Resignada tome el sobre, y mire el contenido, ni modo me dije tenía que comprar comida para sobrevivir el resto de la semana, no podía gastarlo en ropa.
Cuando volvía con los víveres que se supone me durarían toda la semana, me detuve al ver, una tienda de segunda mano, y se me ocurrió una idea, y me sobraba un poco de dinero, así que entre.
Después de tanto buscar encontré un par de suéteres que me gustaron y termine comprándolos, trataría de combinarlos, un poco, mientras podía comprar más ropa.
A la mañana siguiente me levante temprano, para ir a mi primer día de trabajo, al final opte por usar uno de los pocos jeans que tenia. En la universidad amaba usarlos, pero a él no le gustaba que los usara, y al final me deshice de casi todos, ¿Cómo pude ser tan tonta y no notar las señales desde un principió?
Para la parte de arriba elegí una blusa de manga larga, y encima me puse uno de los suéteres de tejido que había comprado el día anterior. Después de desayunar tome mi también ya muy usado y único bolso.
Salí al trabajo, para mi fortuna este lugar estaba a diez minutos de donde yo vivía ahora.
Me detuve en la entrada, ¿Por qué todos los lugares, que existen, me recomendaron uno, en donde solo hay hombres? Me pregunte, comenzando a cambiar de opinión, ¿y si me regreso a mi casa?
-¿eres Abigail? – dijo alguien a mis espaldas, me di la vuelta y ahí estaba una chica
-sí, soy yo – respondí
-mucho gusto yo soy Zoe, hablamos por teléfono antes –
-mucho gusto – le respondí
-¿Por qué no has entrado? –
-estoy muy nerviosa – respondí honestamente, me estaban sudando las manos, por esa razón no quise saludarla
-eso creí, por eso vine, personalmente a presentarte, que no te den miedo estos hombres, se ven muy aterradores, pero son inofensivos –
Zoe parecía una persona ruda por fuera, pero en realidad era muy amable, la seguí al interior, y entramos a un gimnasio, los hombres en el interior, estaban todos alrededor de un ring, y ni siquiera voltearon a vernos, pasamos a una sala de juntas, Zoe se salió, y volvió con un dos hombres, ellos se sentaron de un lado, y Zoe se acomodo al lado mío.
-ella es Abigail – me presento – es la persona que va a estar encargada de las redes sociales personales de Lucian, y nos va a ayudar a mejorar su imagen –
-me parece perfecto – respondió el mayor de ellos, el otro solo estaba en silencio
-¿Qué opinas Lucian? – le pregunto al hombre más joven que solo se estaba mirando las uñas, me daba un poco de miedo parecía enojado, era alto, musculoso, y llevaba el cabello cortado casi a ras.
-¿tengo derecho a opinar? – respondió este
-no, no lo tienes, tu reptación es bastante mala, sobre todo después de tu último video, ignoraste a ese niño –
-ni siquiera lo vi, entre las demás personas, además sabes que detesto dar autógrafos -respondió
-quieras o no eres una persona pública, no siquiera tienes redes sociales, eres como un anciano – lo riño el hombre mayor
-no creo que sea necesario, si ya usas las de la empresa para promocionarme, pero haz lo que quieras – respondió y se salió sin mirarme si quiera, tenía un genio terrible, no estaba segura de poder trabajar con él.
-¿Qué opinas? – me pregunto Zoe
-la verdad no lo sé, el no parece dispuesto a trabajar conmigo –respondí
-Lucian no es mala persona – me respondió ella, solo que sus habilidades sociales son pésimas, haz el intento de trabajar aquí, necesitan un mano, solo debes ayudarlos con sus redes sociales, acompañar a Lucian a eventos, y cosas así, yo los estuve ayudando temporalmente, pero ya no puedo, por eso cuando mi ex compañera de la universidad me hablo de ti no dude en llamarte –
Necesitaba el trabajo, ya me había gastado lo poco que tenia, así que necesitaría un sueldo, por esa razón no me quedo de otra que aceptar.
Lucian
Cuando termine mi entrenamiento me acerque a la sala de reuniones otra vez, ella seguía ahí, trabajando en la computadora, no sé en qué momento se les ocurrió ponerme a trabajar con una mujer, sabiendo lo terrible que era yo hablando con ellas.
Estaba tras la computadora así que ni siquiera noto mi presencia – es hora de que te vayas a casa – fue lo único que atine a decir, pero mi tono fue más brusco de lo que esperaba y soné bastante molesto, lo estaba pero no con ella.
En cuanto me vio, cerro la computadora, la guardo, tomo sus cosas y salió de la sala de reuniones huyendo de mí. Genial acaba de asustarla, era como un gato asustadizo no sería fácil que ella y yo pudiéramos llevarnos bien.
Abigail
Mi primer día no fue nada bueno, me sentía muy desanimada mientras iba camino a casa, pero necesitaba el empleo apenas tenía lo suficiente para sobrevivir al final de la semana, podía ir buscando algo mas por si no terminaba de amoldarme a la situación, por el momento tendría que lidiar con el mal humor de ese hombre.
Llegue a mi casa bastante desanimada, cene algo muy ligero, tome un baño trabaje un rato mas y me fui a dormir, pero no tuve una buena noche, pues las pesadillas vinieron de nuevo, me desperté en el piso, sudando enredada en las sabanas cuando vi la hora ya eran las cinco de la mañana, así que ya no valió la pena volverme a dormir, así que no lo hice, me levante, me senté en la cama, llore un rato y espere el amanecer, cuando este llego me levante, me prepare y salí al trabajo fingiendo que todo estaba perfectamente bien.
Lucian Después de las palabras de su padre, Aby se puso de pie sin decir palabra y salió de la casa, yo me levante, tome los abrigos y fui tras ella, dejando a André en brazos de mi suegra,La seguí ya que ella iba caminando por la calle, la cual estaba vacía, pues esto era una privada, y ya todo mundo estaba en sus respectivas casas, además hacia mucho frio, así que la alcance, y le puse su abrigo sobre los hombros.-cúbrete, vas a resfriarte – ella se detuvo y me vio-lo siento – me dijo acomodándose el abrigo, ya tenía la nariz roja, por el frio-¿Por qué lo sientes? – pregunte, subiéndole el cierre de la chamarra, y poniéndole la capucha, no hace mucho que fue madre, podría enfermarse por haberse salido así-por salirme de esta manera, y por lo que dijo mi padre –-no debiste salirte sin abrigo – le respondí – y por lo que dijo tu padre, es lo que todo mundo espera de nosotros, después de que ya tenemos un bebé –-yo ya estuve casada, y lo sabes, fueron los peores años de mi vi
Lucian Desde que Abigail estaba embarazada y estuvimos pensando en nombres, para niño y niña, una vez que nos dijeron que sería niño, seguimos en la búsqueda de nombres, cuando el bebé nació aun no teníamos claro que nombre ponerle, así que nuestro bebé ya tenía un mes de nacido y seguía sin tener su oficial.-Ahora que vayamos a ver a mis padres, querrán saber el nombre, te aseguro que mi nos va a regañar por esa razón – me dijo Aby, mientras hacíamos las maletas, pasaríamos la navidad con mis suegros, pero ahora éramos cuatro contando a Loki, así que nuestro equipaje era el doble, y por supuesto la mitad de esas cosas eran del bebéAby saco un montón de ropa del bebe, y lo puso sobre la alfombra – cariño, ¿no vamos a llevar toda esa ropa, o si?- le pregunte-es que no se cómo estará el clima allá – me respondió ella – además solo voy a llevar la ropa calientita – me dijo ella- pero ese suetercito ya no le queda – le dije señalando uno que estaba por meter en la maleta-¿Qué, como
Abigail Estaba cansada, pero estaba feliz, mamá se regreso a casa después de una semana a partir de ahí éramos solo nosotros tres, y el perro, Lucian estaba muy ocupado, ya que yo en este momento no estaba trabajando en el gimnasio, solía hacerlo desde casa, los planes de abrir la tienda llegaron al parecer en un mal momento, así que durante el día, por lo general éramos solo nosotros dos, la señora de la limpieza venia, tres veces por semana, y me hacia algo de compañía, el bebé era tranquilo, eso era bueno.Así que cada que tenía un momento libre trabaja en el proyecto desde la computadora, lo que me tenia cansada era amamantar, despertar varias veces por la noche para darle de comer, me mantenía con sueño durante el día, pero amaba tener esa conexión con mi bebé, es algo que no cambiaría por nada, a veces tomaba siestas durante el día, junto con el bebé, así recuperaba algo de energía.Además Lucian era un gran padre, solía encargarse de varias cosas al llegar, como bañarlo, cambi
Lucían En cuanto Aby me despertó, y me dijo que se le había roto la fuente, comencé a ir de un lado a otro preparado todo lo necesario para llevarla al hospital, me vestí rápidamente y la ayude a ponerse algo limpio, saque del clóset la maleta que teníamos preparada, nos apresuramos hacia el auto.La silla para el bebé la instale en la camioneta días antes, así que eso ya estaba listo.Gracias a la hora la carretera estaba casi vacía, eso facilitaba las cosas, aún así me sentía nervioso por qué Aby estaba con las contracciones.En cuanto llegamos al hospital corrí al interior a pedir a un médico, las enfermeras vinieron conmigo trayendo consigo una silla de ruedas, yo tomé la maleta y fui al interior con ellas.Nos pasaron a la habitación, y las enfermeras comenzaron a prepararla y a revisar que todo estuviera bien.Entre tanto ajetreo había olvidado llamar a sus padres, o a cualquier persona, así que salí un momento a hacer un par de llamadas, necesitaba que Mike fuera a recoger a
AbigailMe dejaron ver a Basil días después, yo también estuve internada algunos porque se me descontrolo un poco la presión, lo encontré sentado tenía una tableta en la manos.-hola – le dije en voz baja al entrar, el levanto la vista, y me sonrió.-¿Cómo estás? – pregunte, acercándome.-estoy bien, no te preocupes demasiado por mí, ya me siento mejor, no fue una herida tan profunda, me dijo mostrándome sus manos que estaban vendadas, el metió la manos, por esa razón también se las lastimo.-gracias, por salvarnos a ambos – le dije tocando mi vientre, me alegro de que ya estés mejor, me habría sentido demasiado culpable si te hubiera pasado algo peor –-tranquila, lo hice por que quise, no podía permitir que les pasara algo malo, ni a ti, ni a tu bebé –-ambos estamos bien, ahora, es solo que me puse demasiado nerviosa cuando todo sucedió –-¿estás dada de alta ahora? – me pregunto-lo estoy, cuando Lucian vuelva, podre irme a casa por fin, no me gustan los hospitales, pase muy malos
Abigail Todo fue un caos, yo no sabía que estaba pasando, alguien estaba gritando, que llamaran a una ambulancia, Camilo intento irse, pero el personal de seguridad lo derribo, Mike vino, me tomo del brazo y me saco de entre la gente, Lucian estaba sosteniendo a Basil, pero yo no sabía que estaba sucediendo, no lo entendía, y nadie me decía nada, todo daba vueltas a mi alrededor, me sentía mal, culpable. Si algo le pasaba a Basil, sería mi culpa, de repente comencé a ver todo oscuro, y me desvanecí.Zoe Llegue al hospital corriendo, me cruce con varios periodistas en la entrada, no entendía que estaba pasando, solo me dijeron que viniera, que se trataba de Basil, estaba a punto de preguntar por él, cuando vi a Mike, y fui hacia él.-¿Qué carajos paso Mike? ¿Dónde está mi prometido? ¿Cómo está Aby?--tranquila, son demasiadas preguntas, de una por una –-¿Qué paso? Dime –-el ex marido de Aby aprovecho la multitud para acercarse, quería herirla, pero tu prometido se interpuso –Sentí
Último capítulo