—Te dije Michael, te lo repetí muchas veces y no quisiste creerme ¡Era tu hijo! Y esta mujer lo mató deliberadamente para apartarte de mí —sollozó la mujer.
Natasha tragó el nudo formado en su garganta y esperó a que la policía entrara por la puerta para llevarla a prisión. Su mirada viajó del rostro serio de Michael al rostro complacido de Ava, aunque la mujer era una actriz consumada y sollozaba, sabía perfectamente que su mirada era de satisfacción, porque ella misma le había confesado la verdad.
—¡Llama a la policía, papá, no quiero ver a esta asesina nunca más! —gritó Ava y Aiden caminó hacia la puerta.
—Me parece perfecto que la policía llegue, veremos como explicaras esto —respondió Michael con acero en su voz.
—¿Qué más hay que explicar, Micha