Capítulo 10: La llave del estudio.
Cuando Donovan se detuvo frente a la mesa de jardín. Rosalind levantó la mirada, sosteniendo en sus manos el teléfono con un ligero temblor de sus dedos.
Por supuesto, tal gesto, su marido lo notó al instante.
—¿Está todo bien? —preguntó él en voz baja, mientras se sentaba a su lado.
—Toma… —Rosalind extendió su teléfono y él lo tomó en su mano.
—¿Lograste saludar a tu padre? —preguntó doña Jacqueline.
El CEO Ainsworth, levantó la mirada hacia su madre y le dedicó una pequeña sonrisa.
—Lo hice —él volvió a ver a la pantalla. De inmediato sacó su teléfono celular, haciendo una rápida llamada—. Interven el teléfono de mi esposa con el programa. Investiga, quiero respuestas para esta noche.
¡Rosalind abrió sus ojos con sorpresa!
"¿Intervenir mi teléfono con el programa? ¿Me vigila?… Bueno… Claro que lo haría… ¡Qué desconfiado! ¡No es como si yo fuera a serle infiel!"
Pensó ella frunciendo ligeramente el ceño, y volviendo a ver hacia la taza de té frente a ella, con el