Capítulo seis: Te odio
"Narra Sabrina Spencer"
—No he tocado a ninguna otra mujer, Brina, lo prometo. Ella me hizo proposiciones… me susurró al oído y yo le dije que no.
Me besó antes de hundirse en mi cuerpo y, cuando yo dejé escapar un gemido, aprovechó para besarme con pasión a la vez que empujaba las caderas hacia delante, apartándose con ligereza antes de enterrarse del todo en mi interior.
Un gemido ronco escapó de sus labios y el placer fue como una descarga eléctrica por todo mi cuerpo. Envolví las piernas en su cintura, animándolo, urgiéndolo a ir más deprisa. No tenía paciencia. No quería hacer un esfuerzo para controlarme. No había nada más que él, nada más que aquello. Nada más que un año de rabia y frustración quedando al descubierto a medida que nos librábamos de las inhibiciones.
Noté las sacudidas del cuerpo de Fabio, el placer robándole el control... y me gustó. Me sentí orgullosa, pero no era suficiente. Quería darle placer, desde luego. Quería que pensara en aquello