Una porquería.
Un basurero.
Una aberración... Eso era aquel lugar olvidado por Dios.
Una silla a punto de volverse polvo salió volando, cuando recibió una patada con furia desmedida... Cómo si ella fuera la causante de toda aquella miseria.
Años y años tramando, calculando cada paso, midiendo meticulosamente cada movimiento, para no darle lugar a nada que pudiera llevar sus planes al fracaso y al final... Todo se había ido al demonio.
Una taza raida se hizo trizas cuando impactó de lleno contra la pared, mientras aquel nombre llenaba su corazón del más puro y vivo odio.
Aura de Luca... ó Aura Lamprou, cómo los medios preferian llamarla ahora.
Había tratado de quebrarla, destruirla... Minar su voluntad hasta que se diera por vencida... Pero tenía más entereza de la que había imaginado.
Y no lo entendía.
¿Por qué ella obtenia gloria sin esfuerzo?, ¿Por qué a pesar de todo contratiempo siempre salía airosa de cada situación?. ¿Por qué Aura de Luca parecía tener la vida resuelta sin lucha