Capítulo 31: Mal presagio.
Una vez que Anna estuvo bien sujeta al lomo de Damon, el lobo comenzó a correr a toda velocidad, ignorando los saludos e inclinaciones de la gente que comenzaba a prepararse para los entrenamientos, los cuales, serían dirigidos por Elliot.
Por fortuna, gracias a la velocidad del lobo, el camino de regreso fue corto, por lo que, pronto, se encontraron atravesando el portón principal, por lo que Damon, nada más entrar, corrió directo al pueblo.
― ¿Cómo llegaste tan rápido a la cabaña? ―preguntó Anna ―Gino me dijo que estabas en la casa de la manada ―
“No lo sé cariño, solo recuerdo que me disponía a dormir un poco por petición de Lysander, sin embargo, Alina me enlazó y me contó lo que te había pasado, de repente, ya estaba a medio camino”
Ante su explicación, Anna soltó una risita y se recostó sobre el lomo de Damon.
―Te amo ―le susurró, lo que provocó que el lobo soltara un suave ronroneo
Para cuando llegaron al bar, este ya estaba abierto, y Rafael, los esperaba en la puerta.
―Está t