Capítulo 18: Buenas noticias.
Tras trabajar arduamente gran parte de la noche con Chloe y Gerard, finalmente amanecía en Loto de Luna, y mientras todos comenzaban a ocuparse de sus deberes, Anna tenía los ojos clavados en el reloj de la recepción del hospital.
Habían pasado ya cuarenta minutos desde que Dante había entrado a la oficina de Julia, y desde entonces, la puerta de la oficina se había mantenido cerrada.
Aquella mañana, Ragnar los había excusado de la carrera matutina, ya que, a todos, les había preocupado la salud de Dante tras haber escuchado la historia de Gerard y la confesión del propio Dante sobre su afección del corazón
Pese a la insistencia del lobo afirmándoles que se sentía bien, Anna y Lysander prácticamente lo arrastraron al hospital para hacerlo cumplir con la cita que tenía con Julia, sin embargo, ya llevaban más de una hora y cuarenta minutos entre los exámenes y la consulta, y aún no tenían ninguna novedad.
Debido al ansia, Anna estaba por perder la poca cordura que le quedaba.
― ¿Aún nad