--- Ana Teyssier ---
Siento tanto coraje, estoy realmente molesta, mi voz quería quebrarse en ese mismo instante, no llevo ni dos días trabajando para este hombre y ya me siento una fracasada. Creía que mi trabajo sería como en México, puedo lidiar con un jefe mandón y molesto, pero eso de lidiar con un hombre, sus amores y luego su carácter voluble, eso, eso era excesivo.
No quiero regresar a México, no quiero, de verdad que no, es por eso que a pesar de sonar ridículo no cuestione aquel mal intencionado contrato, pero si mi vida iba a estar llena de mujeres que quieren a mi jefe y lo odian, no creo estar lista para este puesto.
Resignándome a que después de decir lo que me salió desde la panza, seguro que el señor Müller me despedirá, finalmente cuando llego a la oficina de Bruno, me suelto a llorar, un poco de coraje y frustración, pero eso no es todo, la verdad es que lloro porque no quiero regresar a México, mi familia está ahí y la amo, pero, Diego casado él también ahí está.
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